Entrevista realizada por Jerry Van Kooten para la web holandesa de rock progresivo "DPRP" tras un concierto de Roger en Frankfurt, sólo tres días después de su triunfal regreso a Inglaterra.

Después de que Roger Hodgson publicase “Open the door” en el año 2000, su último álbum de estudio en más de una década, llegaron unos cuantos años más de silencio relativo para sus fans. El año pasado dio algunos conciertos en Alemania, Holanda y Malta, y se está animando a dar más. En Noviembre y Diciembre de 2005 dio varios conciertos en Alemania y, lo más importante de todo, dio su primer concierto en Gran Bretaña después de 23 años. En el año 2006 dará más conciertos, uno de los cuales será en el Festival de Jazz de Dubai.
 
Yo entrevisté a Roger en el año 2000, después de un concierto en Amsterdam que tuvo mucho éxito, y ahora he tenido la oportunidad de volver a hablar con él después del concierto que dio en Frankfurt.
 
La noche anterior habíamos asistido al concierto benéfico que Roger dio en un recinto precioso, utilizando una sección de cuerdas de la orquesta filarmónica local para algunas canciones y una banda completa para la última canción, con una audiencia en la que se mezclaban fans, organizadores del festival benéfico y ejecutivos de los negocios.
 
Durante la entrevista Roger parecía contento, tenía buen aspecto y obviamente se sentía bien. Estuvo tranquilo, amable y hablador. Yo tenía preparada una pequeña lista de preguntas, pero la conversación tomó diferentes rumbos, e incluso antes de que yo hiciese mi primera pregunta, él empezó a hablar.
 
ROGER: Han pasado cinco años, ¿no?
 
JERRY: Sí. Desde Junio del 2000, justo después de que visitases Amsterdam por segunda vez.
 
ROGER: Justo después de “Open the door”...
 
JERRY: ¡Estuvimos en el concierto de anoche y nos gustó mucho!
 

ROGER: ¡Genial!


JERRY: ¿Te gustó a ti?
 
ROGER: Sí. Fue una noche extraña. Combinaciones diferentes de cosas diferentes, pero disfruté tocando. Cosas diferentes que tuvieron lugar sobre el escenario... No fue simplemente un concierto de Roger Hodgson como los que doy ahora. Tuve que ensayar con la sección de cuerdas, y después con la banda.
 
JERRY: ¿Hicieron los arreglos de cuerdas ellos mismos?
 
ROGER: No, yo se los había enviado. Me dijeron que podían conseguir una sección de cuerdas para que me acompañase, así que les envié las partituras y se las aprendieron. Ensayamos un par de veces a lo largo del día.
 
JERRY: Creo que quedaron muy bien.
 
ROGER: Sí, hicieron un buen trabajo. Tocaron al mismo compás que yo, lo cual es estupendo.
 
JERRY: Hubo un par de canciones en las que no tenían que tocar, pero también se les veía entusiasmados durante las mismas. ¡Creo que entre los miembros de la orquesta había unos cuantos fans de Roger Hodgson y Supertramp!
 
ROGER: ¡Sí! El caso es que me enteré de que son como una orquesta independiente, tocan un montón de cosas diferentes, no sólo música clásica. Así que tal vez por eso estén más abiertos. Y eso es bueno, estuvo muy bien.
 
JERRY: ¡También hubo un saxofonista! Ese es un nuevo elemento en tus conciertos...
 
ROGER: Eso es lo que más echaba de menos la gente, y yo también, en mis conciertos en solitario: el saxofón. Le conocí en Canadá, y es genial, se preocupa por lo que toca, lo practica y es muy bueno. Es maravilloso haber descubierto un nuevo talento tan joven. Es estupendo contar con él, y lo que hacemos entre los dos. Si no te importa que no haya batería, hacemos un sonido muy bueno.
 
JERRY: ¿Es este el comienzo de algo más grande? ¿Más músicos?
 
ROGER: No, no creo, estoy disfrutando de la sencillez de los conciertos en solitario. Y cuando digo en solitario, me refiero a él también. Porque así es todo más fácil: puedo coger un avión e ir a cualquier parte del mundo sin tener que llevar todo el equipo de producción conmigo. Ayer llegué para pasar aquí unos cuantos días, y los sonidos que se oyen en los conciertos, sobre todo los del piano, han surgido de mi ordenador. Así que dentro de un año o dos, espero ser capaz de ponerme mi ordenador bajo el brazo, y eso será lo único que necesitaré. Le pediré al promotor que me consiga un teclado y ya podré dar un concierto.
 
JERRY: Evidentemente, ayer tenías un piano de verdad...
 
ROGER: Sí. ¡Generalmente, aunque son muy bonitos, no suenan tan bien como en mi ordenador! De vez en cuando encuentras alguno perfecto, pero al poner un micrófono en el piano pierdes mucha calidad de sonido. Aunque la sensación de tocar un piano es maravillosa. El de ayer era un piano bastante bueno.
 
JERRY: ¡Y la acústica del local era impresionante!
 
ROGER: El local era impresionante, pero el sonido amplificado no fue todo lo bueno que debía haber sido. Los organizadores del concierto de ayer no eran expertos en ese tema, desconocían muchas cosas. Así que eso fue un contratiempo, pero pudimos superarlo. Yo llevo siempre conmigo a mi propio técnico de sonido, que se ocupa de todo. Y él consiguió el mejor sonido posible.
 
JERRY: Yo sé de muchos locales donde utilizan siempre al mismo técnico de sonido, que no conoce a los artistas...
 
ROGER: Así es más difícil... Yo confío en él, porque también llevo como monitores unos auriculares y puedo escucharlo todo. Todo lo que yo experimento es lo que él experimenta: quién está mezclando el sonido, si hacen algo mal... Escucho exactamente lo mismo que escuchan ellos. Y hay gente que escucha la música de una forma muy extraña. Así que estoy contento de poder contar con él.
 
JERRY: Si sólo hay un músico, ¿es más fácil hacer esa monitorización que si hubiese que mezclar a cinco o seis músicos?
 
ROGER: Es curioso, de alguna forma es más fácil si tienes todo el conjunto, incluyendo batería, bajo y lo demás. Lo que yo intento hacer, siendo un único músico, es crear un verdadero sonido de conjunto. Tengo algunos sonidos estupendos, como uno de piano y otros diferentes, que utilizo para crear un gran sonido. Pero después hay que trasladarlo al sistema de amplificación. Eso es algo bastante delicado, no es tan sencillo.
 
JERRY: ¿Notaste algo respecto a la mezcla de públicos que había en el concierto? Ya sabes, alguna diferencia entre la gente que había ido a verte a ti y la que estaba allí porque era un concierto benéfico...
 
ROGER: Sí, anoche noté mucho esa diferencia. Podía ver que había gente que había ido a verme a mí, ¡y otra que se preguntaba quién demonios era yo!
 
JERRY: Pero tocaste algunas canciones muy conocidas...
 
ROGER: Sí, pero también había algunos viejos colegas dando su apoyo al evento. Espero que ellos disfrutasen del concierto...
 
JERRY: ¿Cómo fue el concierto, en comparación con el que habías dado un día antes en Heilbronn?
 
ROGER: Aquel fue simplemente un concierto habitual de Roger Hodgson. Estuvo bien, muy bien, me gustó mucho. El día anterior acababa de llegar de Inglaterra...
 
JERRY: Eso conduce a mi siguiente pregunta…
 
ROGER: En Inglaterra sentí mucha presión. Fue un buen concierto y requirió mucha energía. Me alegré de volver a estar en Alemania, donde no siento tanta presión, así que en Heilbronn estuve más relajado de lo que había estado en Inglaterra. Fue un concierto muy agradable.
 
JERRY: ¿Cómo te sentiste al volver a pisar un escenario en Gran Bretaña?
 
ROGER: Intenté pensar que se trataba simplemente de un concierto más, aunque nunca pienso que un concierto es simplemente un concierto más... Pero intenté no pensar mucho en ello. Muchos de los presentes me conocían personalmente, llevaba 22 años sin tocar en Inglaterra, mi familia estaba allí... Así que intenté hacer lo que normalmente hago. Y me salió bastante bien.
 
JERRY: ¿Y después de obtener el reconocimiento del público?
 
ROGER: En realidad, lo más difícil fue que yo estaba muy cansado. Todavía estaba sufriendo los efectos del cambio horario. A las 5 de la tarde me encontraba fenomenal, pero cuando el concierto empezó a eso de las 7  y media, ¡tenía ganas de irme a la cama! Así que a ese nivel fue muy duro.
 
JERRY: Y el público, ¿cómo reaccionó?
 
ROGER: ¡Estaban entusiasmados! Les gustó mucho, y estaban muy contentos de volver a verme. Probablemente hemos recibido más correos electrónicos de la gente que fue a aquel concierto que de cualquier otro concierto que he dado.
 
JERRY: Bueno, después de 22 años... ¿Qué esperabas? ¿Consiguió esa reacción del público aliviar algo de la presión que sentías?
 
ROGER: ¡Me han hecho pensar que tal vez deba volver allí pronto! Creo que aquello fue una gran inyección de moral. Me encuentro en un momento de mi vida en el que no estoy interesado en conquistar el mundo o conquistar el país que visito. En vez de eso, prefiero ir donde la gente me quiera, donde quieran verme. Nunca me había dado cuenta de que en Inglaterra tenía tanto apoyo, tal vez porque los medios de comunicación ingleses nunca han sido demasiado generosos con Supertramp. No me daba cuenta de que allí había mucha gente que quería que yo volviera. ¡Pero ahora probablemente vuelva a hacerlo!
 
JERRY: Así que los medios de comunicación pintan retratos poco realistas...
 
ROGER: Un locutor de radio me dijo el otro día que los medios siempre habían sido muy crueles con Supertramp. Y es verdad, nunca fuimos los predilectos de los medios. Tal vez les resultábamos aburridos porque no les proporcionábamos ningún escándalo sobre el que escribir. Y no creo que les molestase nuestra música, porque no provocaba mal humor ni angustia, ni tenía nada que ver con lo que estaba de moda por entonces, pues íbamos con el paso cambiado respecto a las modas. Así que no creo que supieran qué hacer con nosotros. No nos poníamos a dar saltos sobre el escenario, o sea que si no les gustaba la música probablemente se aburrían en nuestros conciertos. Pero para la gente de los medios a quienes sí les gustaba la música, era todo lo contrario. Casi parecía que la reacción de cada medio, dependiendo de si se interesaba por la música o por las vidas de los músicos, era la de amarnos con fanatismo o por el contrario encontrarnos aburridos. O ni siquiera conocían al grupo, jamás habían oído hablar de él. Hay mucha gente que nunca ha oído hablar del grupo. Es realmente curioso: o es blanco o es negro, no hay término medio. No existe la opinión de: “Ah sí, Supertramp, vale”...
 
JERRY: Supongo que no habrán oído hablar de vosotros hasta que escuchan algunas canciones...
 
ROGER: Sí, después atan cabos y ya conocen a Supertramp. Conocen la música más que la banda. Hoy en día no hay programas de radio que hablen de Supertramp, o de Genesis... No dan a conocer esas canciones, así que ¿cómo va a descubrirlas el público?
 
JERRY: Hay algunas emisoras de radio que todavía ponen ese tipo de música... Bueno, los grandes éxitos, no otras canciones menos conocidas.
 
ROGER: Bueno, todavía las ponen en muchas partes del mundo. Todavía suenan con fuerza en la radio. Creo que tal vez esa es la razón de que la antología, ese nuevo disco recopilatorio, se esté vendiendo tan bien. La gente conoce seis de las canciones que se oyen en el anuncio de televisión, y después ven el nombre del grupo y atan cabos.
 
JERRY: ¿Has tenido algo que ver en la selección de las canciones para el recopilatorio?
 
ROGER: No, fue Rick quien eligió las canciones junto a la compañía de discos. Mi única aportación ha sido la de ofrecerme, ya que no formo parte de la banda, para dar conciertos y ayudar a promocionarlo. Todavía se trata de mi música, y es una gran parte de mi legado.
 
JERRY: Claro, más o menos la mitad de las canciones son tuyas...
 
ROGER: Sí, y es curioso. Cuando miras la pegatina que acompaña al disco, las canciones que puedes leer son todas mías excepto una de Rick, “Summer romance”. Así que han incluido muchas de mis canciones en esa pegatina.
 
JERRY: ¿Qué te parece la recopilación? ¿Crees que Rick ha hecho un buen trabajo seleccionando esos temas?
 
ROGER: Puedo entender por qué seleccionó esas canciones. Desde su punto de vista, se trata de Supertramp desde el primer día hasta lo que es en la actualidad. Probablemente yo lo habría hecho de forma diferente, porque veo al Supertramp de ahora como una banda totalmente distinta, una época totalmente distinta. En realidad no veo ninguna conexión entre este Supertramp y aquel otro. Es obvio, pues yo ya no formo parte del grupo, pero creo que la gente todavía... Hay un abismo entre lo que la gente conoce como la época dorada del grupo, o como quieras llamarlo, con los cinco músicos que éramos, y en lo que se ha convertido después, que realmente es un proyecto en solitario de Rick. No sé qué selección de canciones habría hecho yo, pero seguramente me habría centrado más en esos años dorados, y habría añadido más temas adicionales o maquetas, haciendo que el disco resultase más interesante.
 
JERRY: ¿Existen muchas canciones no publicadas?
 
ROGER: No, no hay demasiadas, pero existen maquetas y diferentes mezclas de otras canciones, como por ejemplo “Brother where you bound” en la que yo también participo, u otras canciones de mi carrera en solitario como “Only because of you” o “Hooked on a problem” interpretadas por todo el grupo.
 
JERRY: Y el single de 1975, “Land ho”...
 
ROGER: Bueno, ese tema sí está en el recopilatorio. Esa canción y “Summer romance” son las únicas novedades del álbum. Si yo fuera un fan del grupo, ya tendría todos los discos y no sé si necesitaría comprarme este. Pero ya han pasado 22 años desde “Famous last words” y hay un par de generaciones de gente joven que no tiene ni idea de quiénes somos. Por eso me gusta la idea de publicar este recopilatorio, para que mucha gente tenga la oportunidad de descubrirnos.
 
JERRY: En el concierto de ayer había mucha gente joven entre el público...
 
ROGER: ¿Sí? Estupendo… Cada vez vienen más jóvenes a mis conciertos, y me cuentan que cada vez más gente joven está descubriendo nuestra música.
 
JERRY: Si miro el repertorio habitual de la mayoría de tus conciertos, observo que ayer dejaste fuera algunas canciones.

ROGER: Ayer eliminé “Even in the quietest moments”. Y necesito otra guitarra para tocar “Along came Mary”, la habría tocado si hubiera tenido otra guitarra. El problema es que sólo pude llevar una guitarra. La noche anterior había tocado “Open the door”, pero ayer daba la sensación de ser más un concierto de música clásica. Todo el mundo estaba un poco callado, no cantaban las canciones. Anoche “Open the door” no parecía la canción más adecuada, lo decidí antes de que empezase el concierto. Además, esa canción requiere un gran esfuerzo para mi garganta. Si tengo la voz cansada, y anoche la tenía un poco, esa canción me la desgasta mucho, así que no quise correr el riesgo. Cuando me encuentro bien y repleto de energía suelo tocarla, pero anoche estaba un poco cansado después de tres conciertos en tres días, así que decidí no arriesgarme. Evidentemente, me gusta añadir más canciones de mi etapa en solitario si puedo, sobre todo “Along came Mary”. Me encanta esa canción.
 

JERRY: Pero tocaste una canción nueva. ¿Se llama “Keep the pigeons warm”?

 

ROGER: Sí, “Keep the pigeons warm”.


JERRY: ¿Se trata de una expresión inglesa?
 

ROGER: No...


JERRY: No entendí toda la letra, pero dices varias veces la palabra “brother” (“hermano”). ¿Sobre qué trata la canción?
 

ROGER: Hum…


JERRY: Bueno, si quieres hablar sobre el tema…
 
ROGER: Oh, Dios mío…
 
JERRY: Si quieres mantener el secreto hasta que la grabes y la publiques, no pasa nada…
 
ROGER: Hum... Sí, todavía no he terminado la letra... No, ya contestaré a esa pregunta en la próxima entrevista.
 
JERRY: De acuerdo, no hay problema. ¿Hay alguna novedad sobre nuevas canciones o un nuevo álbum?
 
ROGER: Bueno, de momento no hay nada planeado. Como sabes, pues conoces muy bien mi historia, he estado desaparecido bastante tiempo. Es bonito haber regresado, tocar de nuevo y dejar que la gente sienta mi presencia otra vez. Me estoy divirtiendo más que nunca, soy más feliz que nunca y siento menos presión que nunca. Me estoy dejando llevar por la corriente con las cosas que me piden. Hay mucha gente que quiere tener un DVD de un concierto mío, así que esa ha sido nuestra principal prioridad, grabar un DVD que sea lo bastante bueno como para publicarlo.
 
JERRY: ¿Has grabado los conciertos?
 
ROGER: Sí, hemos grabado unos cuantos conciertos. Grabamos el de Londres, así que estamos esperando a ver cómo ha quedado.
 
JERRY: ¿Y cómo van las cosas en cuanto a la composición de canciones?
 
ROGER: Probablemente te dije la anterior vez que siempre he tenido un gran archivo de canciones. Todavía tengo unas setenta u ochenta con las que trabajar. Tal vez cuando llegue el momento apropiado para grabar un álbum me ponga con ellas. Es como construir un edificio, lo vamos haciendo poco a poco. No tiene sentido grabar un disco y publicarlo si no tienes detrás la maquinaria necesaria para promocionarlo. No quiero pasarme cinco, seis o siete meses grabando un álbum para que después pase desapercibido. Así que tienen que encajar todas las piezas, y lógicamente el ambiente es muy distinto en todo el mundo. Para publicar un álbum se necesita que todo funcione. Ahora no tengo ningún contrato y no noto presión alguna, así que es divertido tocar algunas canciones nuevas, bromear con la gente... Mientras tanto, los conciertos están yendo muy bien, la gente se alegra de verme. Yo me lo estoy pasando mejor que nunca, y todo se desarrolla de una forma muy orgánica. Mis representantes son gente maravillosa y se preocupan mucho por mí, como persona y como músico, haciendo las cosas con mucha sensatez. Vamos aprendiendo sobre la marcha.
 
JERRY: Ayer dijiste que si al público le gustaba “Keep the pigeons warm”, la grabarías. ¿Fue buena la reacción que tuvieron con esa canción?
 
ROGER: Sí, eso forma parte de las bromas que hago con el público cada noche... No sé por qué elijo esa canción inédita para tocarla en directo, pues tengo muchas otras, pero probablemente la grabaré algún día. Creo que quedaría bien acompañada de una orquesta... Esa es otra cosa que estoy haciendo, he dado varios conciertos con orquesta en Canadá... Funciona muy bien, al público le gusta mucho.
 
JERRY: ¿No sería esa una buena idea para un DVD?
 
ROGER: Bueno, visualmente es mucho más interesante... Quiero decir que no sé qué hay de interesante en verme a mi solo en el escenario durante cuarenta minutos...
 
JERRY: ¡Vamos hombre, si la gente aguanta viéndote durante noventa minutos!
 
ROGER: ¡Pero sólo puedes poner en pantalla muchos ángulos distintos de mi cara!
 
JERRY: No se trata sólo de tu cara, sino de la música, el ambiente...
 
ROGER: Para mí, un DVD es incapaz de capturar el ambiente de una noche que fue realmente eléctrica. Es curioso, cada concierto funciona bien, pero de vez en cuando hay uno que es simplemente eléctrico, ¡simplemente mágico! Es algo que tiene que ver con las sensaciones, algo que sucede, es una conexión que no puedo explicar con palabras, que va más allá de la música. Va más allá de cualquier cosa que la gente esperase antes del concierto, es una especie de energía de amor. Es algo que se enciende y explota. Ya hemos vivido algunos conciertos de ese tipo, como el de Heilbronn, que fue muy especial.
 
JERRY: Tuviste que retrasar uno de los conciertos hasta Febrero de 2006. ¿Vas a intentar dar más conciertos alrededor de esa fecha?
 
ROGER: Sí, estamos intentando organizar muchos conciertos. Tengo uno en Dubai en el mes de Febrero, y estamos intentando organizar algunos más por esas fechas. Así no tendré que recorrerme medio planeta para dar sólo ese concierto...
 
JERRY: Han pasado cinco años desde que estuviste en Holanda. ¿Estás dispuesto a dar más conciertos? ¿Podrá asistir gente de todo el mundo a tus conciertos?
 
ROGER: Estoy dispuesto a dar más conciertos ya mismo. He atravesado un divorcio, y tal vez esa sea la razón de que no me hayáis visto en tres o cuatro años. Fue algo muy duro, pero ya lo he superado. Ahora soy más viejo, más sabio, más feliz... y más libre. Así que sí, estamos considerando todas las ofertas que nos llegan. Y eso es lo único que llevo conmigo: esos dos bultos de ahí y mi guitarra. Y ni siquiera necesito la mitad de eso si trabajo con mi ordenador. Incluso he adelgazado, lo cual me hace muy portátil. Y eso es genial, no tener que organizar una enorme maquinaria que sólo tenga sentido si vas a dar un mínimo de veinte conciertos. Sólo necesito a mi técnico de sonido, que está dispuesto a dejarlo todo para acompañarme a donde sea. Es estupendo poder ser tan portátil y tan libre.
 
JERRY: ¿Y qué me dices del saxofonista?
 
ROGER: También hay otro colega de Argentina, que ahora vive en Europa, que me acompaña de vez en cuando. Pero Aaron va a ser probablemente mi principal acompañante.
 
JERRY: En las primeras canciones que le oí interpretar, me pareció que se ajustaba bastante al sonido original. Pero después de un par de canciones, empezó a cambiar cosas, y eso es algo que me gusta.
 
ROGER: Para él es difícil, porque la gente quiere escuchar el sonido original. Es cuestión de encontrar ese equilibrio cambiando un poco el sonido sin dejar de capturar el espíritu de la canción. Para él es una tarea difícil, pues es un gran saxofonista. Creo que en la última canción de ayer (“World vision”, en la que intervinieron todos los artistas del festival), su interpretación fue la mejor.
 
JERRY: ¡Sí, en esa canción hizo un solo muy largo!
 
ROGER: ¡El salvó la canción! Yo pensé: “¡Gracias, Aaron!”. Tenías que haber estado en el escenario. La gente parecía decir: “¿Quién va a parar esto? ¿Quién se encarga de esto?”...
 
La media hora concedida para la entrevista se estaba acabando, y yo estaba dispuesto a terminar la conversación. Roger no.
 
ROGER: Es increíble cómo “Give a little bit” se ha convertido en un verdadero himno. Es interesante empezar y terminar los conciertos con esa canción. He descubierto que a la gente le gusta que el concierto empiece así, pues todavía no están metidos de lleno en el concierto ya que acaban de llegar de su trabajo, y con esa canción empiezan a abrirse. Pero cuando al final del concierto llega otra vez el momento de cantar “Give a little bit”, ya están preparados para... ¡volverse locos! Es una auténtica medida de cómo se ha desarrollado el concierto, de cómo se ha integrado el espíritu de toda la noche. Incluso ayer, con un público poco animado (aparte de la gente que había venido a verme a mí), pude ver a todo el mundo puesto de pie y dando palmas.
 
JERRY: Para mí fue bonito ver cómo también se levantaban y aplaudían las personas que iban vestidas de etiqueta. Tal vez esa fue la música de su juventud...
 
ROGER: Sí, tal vez... El caso es que funcionó y ellos participaron del concierto, y eso es bonito. Por eso me gusta ir paso a paso y no gastar toda la energía de golpe, y parte de mi trabajo es disfrutar mientras toco. Cuando ves a un intérprete que está disfrutando mientras toca, es algo contagioso. Es muy difícil que el público disfrute si el intérprete no disfruta. Si yo me lo estoy pasando bien, noto que eso permite que los demás se lo pasen bien. En cierto modo, un intérprete es como un espejo: sólo tocas ante una persona. Da igual si en el público hay quinientas, cinco mil o cincuenta mil personas: tú tocas sólo ante una persona. Y tienes que conectar con esa persona. Todos son diferentes, tienen diferentes personalidades, vienen de distintos lugares, pero todos tienen un corazón y quieren pasarlo bien.
 
JERRY: ¿Crees que eso es un talento que tienes?
 
ROGER: No es algo que quiera analizar, pero sí, creo que es algo que va conmigo. Es curioso, pero es raro ver a los músicos sonreir. ¿Qué hay de malo? ¿Nadie quiere ser feliz? Yo no podría subir a un escenario con el gesto serio y tocar mis canciones sobre lo desagradable que es la vida, incluso aunque muchas de mis canciones tengan letras profundas y encierren mucho dolor. Pero en cuanto a lo que yo quiero ofrecer en mis conciertos, si tengo que utilizar una palabra, esa es amor. Amor es una palabra enorme que engloba muchas cosas. Se trata de sentirse bien por dentro, y olvidarnos de todo lo demás durante una hora o dos. Eso es lo que quiero y, por suerte, lo que puedo hacer por el público. Y eso es lo que hace “Give a little bit”: dame un poco de tu amor y yo te daré un poco de mi amor. Para mí, eso representa lo que yo intento hacer en los conciertos, y por eso me gusta empezar y terminar con esa canción. Es una medida del éxito que ha tenido el concierto, y una gran experiencia con la que marcharse a casa. ¡Así que es perfecta! Es una de mis canciones favoritas, muy sencilla pero muy profunda dentro de su simplicidad. Tenía 19 ó 20 años cuando la compuse.
 
JERRY: Y todavía funciona…
 
ROGER: Sí. ¡De hecho, funciona mejor que nunca! Cuanto más complicada es la vida, más necesitamos recordar las verdades más simples. Y no estoy hablando de “dar mucho”, sino simplemente de “dar un poquito”, y después sentirse bien. Y tal vez después “dar un poquito” más. Creo que ese es el secreto de la vida.