Sí, el caso es que el mensaje que sigue tampoco será bueno. Sé que muchos admiradores de Supertramp siempre ven solo lo positivo del grupo, pero yo (también admirador de Supertramp) no puedo evitar ser honesto y decir lo que sentí y cómo viví el concierto de Barcelona aunque a algunos no les vaya a gustar lo que sigue.

Todos sabemos que Roger Hodgson interpreta sus propios temas de puta madre y que no hace falta oirlos de boca de otros. La organización del concierto de Supertramp respondió a esta pega, y justificó la interpretación de esos temas, diciendo que era "una ocasión para disfrutarlos en el contexto de un increíble espectáculo de luces y sonidos" (ya que, decían esos organizadores, "los conciertos de Roger son muy pobres puesto que solo actúa él y otra persona en el escenario" y bla, bla bla).

Bien. ¿Qué ha sido de aquella promesa? Nada de nada. Nueve músicos (¡nada menos que nueve!) sobre el escenario. ¿Y? Las mismas películas que hace veinte años acompañando los temas, y los mismos juegos de luces, ¡con lo que ha llovido desde entonces! Un concierto muerto, repetitivo desde hace dos décadas. Un sonido pobre. Como ha dicho el participante anterior, el bajo casi ni se oía (yo estaba en la fila doce de debajo del escenario), la batería tenía muy poco volumen (cosa que se añoró especialmente en temas como Crime of the Century) etc.

Roger, con un acompañante solo, crea mucho más espectáculo. Como prueba, basta recordar que su interpretación de Child of Vision es tan envolvente, y casi indiferenciable, de la interpretada por todo el grupo. Pero, claro: Roger no tiene el nombre de Supertramp. Esa es la clave: el rebaño se guía por los nombres.

Para más inri, se permitieron fusilar seis canciones de Roger Hodgson más School (cuya sola interpretación, sería comprensible por las aportaciones que hizo Rick, y que reconoce el mismísimo Roger). Ahí estaba el tipo ese, hijo de Bob, con su pelo cortado igual que Roger Hodgson. Reconozco que, con su imagen, cumple muy bien su función de intentar confundir a los despistados, haciendo creer que es el cantante original del grupo. Pero, lo peor fue ver aparecer al otro con su sombrerito, cantando en plan Mecano temas como Dreamer, y otros que no deseo recordar, poniendo una mano en el teclado y señalando al público con la otra, mientras el hijo de Bob intentaba aclararse metiendo mano en el piano eléctrico. Este y el hijo de Bob, se limitaban a interpretar de manera muy floja (y peor que Mark Hart, con todas las críticas que le hiciéramos en su momento)las canciones de Hodgson. Todo ello, con el beneplácito de Rick, que parece creer que para interpretar los temas de Roger basta dejar que un par de tipos pongan voz de nena insulsa. Se nota, como todo el mundo sabe, que los temas fundamentales de Roger no le gustan a Rick y este se los toma muy a la ligera (especialmente, cuando solo constituyen, para él, una máquina de hacer dinero). Rick, ¡quién te ha visto y quién te vio!

Antes, yo les perdonaba que tocaran dos o tres temas de Roger (sobre todo, en la época en que Roger se retiró de los escenarios por su accidente). Pero, han ido aumentando el número y ya han llegado a fusilar seis (o siete) de los temas exclusivos de Roger. Todo esto me parece muy triste y vergonzoso. Incluso el tema Give a Little Bit, emblema con el que Roger se ha dado a conocer últimamente, y de manera muy exitosa, ha sido utilizado por Supertramp-Rick en la publicidad de su gira, para apropiarse del éxito de la publicidad de Roger con el fin de darse a conocer, como artista compositor independizado de Supertramp. Naturalmente, en el concierto, también fusilaron esta canción (a cargo del hijo del batería, pseudoclon de Roger).

Me hubiera gustado que Rick hubiera dedicado más tiempo a sus temas. Yo, como otros que ya han participado, también heché de menos Asylum. Pero, también Bonnie, Brother Where Your Bound y tantas otras. Pero nada. Tanto le da a Rick que se desvirtúen los temas de Roger, mientras sean una fuente de ingresos para su bolsillo.

Los temas de más éxito del concierto, fueron los de Roger (sin contar la excepción de Another Man's Whoman). Pero la gente va en masa a ver a Rick Davies-Supertramp y no a Roger. ¿Por qué? Como digo, es solo porque Rick tiene el nombre (esa es mi opinión). Porque, lo de que Supertramp garantizaría "un gran espectáculo de luces" ha sido un cuento. No había ni un mísero rayo laser.

Por contra, los conciertos de Roger además de luces, tienen vida propia. Él intenta recrear cada noche los temas de siempre, como si fueran nuevos. Los canta viviéndolos profundamente, se implica personalmente al máximo, se comunica con el público... ¡Incluso últimamente tocó algún tema de Indelibly Stamped! Pero, Rick Davies-Supertramp a lo suyo: a ganar diner. A tocar mortecinamente los temas de siempre (matemáticamente, todos a partir del disco Crime of the Century, que son los que garantizan el dinero, y ninguno anterior. No espereis de Rick la sorpresa de que toque, por ejemplo Try Again o Potter). Nada, nada: a utilizar el mismo juego de luces y las mismas películas de toda la vida y a explotar los temas de Roger. Sobre todo, esto último: a explotarlos al máximo situando los temas de Roger en los momentos cumbre del concierto (basta con recordar, que Helliwell solo presentó dos temas: Breakfast in America y Give a Little Bit. Sin nombrar a Roger, claro está).

Si Rick Davies no tuviera el nombre de Supertramp, hace más de un decenio que estaría retirado de los grandes espectáculos. Pero, él solo vive de las rentas del pasado: de las de Roger, y de las suyas propias de la juventud (puesto que en los tiempos de Crime y de Crisis tuvo la fortuna de componer los mejores temas, en mi opinión, del grupo). Después de Crisis, What Crisis? Rick se fue volviendo cada vez más vago. Hoy solo pone la mano para coger el sobre.

He visto a Rick Davies-Supertramp cuatro veces (Con Brother, Free as a Bird, never Change y el actual). En los tres anteriores vibré no sabeis cómo. Pero, este último ha sido además de una decepción el constatar que hoy Supertramp no es más que una vieja máquina de hacer dinero. Cierto es, que a veces hacen falta unos años de reposo para engrasarla, pero antes o después se pone en marcha para conseguir billetes. Esa máquina hace billetes y no música. Eso es todo.

Los cuatro conciertos de Supertramp a los que he asistido (incluido este), me han costado, además de la entrada, el viaje de avión desde Mallorca y la estancia en una pensión u Hotel. Jamás me he arrepentido de estos tremendos gastos (ni siquiera en los primeros conciertos, siendo yo adolescente y sin tener un duro). Pero, si llego a saber que el actual concierto de Supertramp sería tan flojo y que fusilaría nada menos que seis (o siete) canciones de Roger, os juro que me habría ahorrado este desenbolso.

Solo me han gustado de verdad, e intensamente, de este concierto, las interpretaciones de Another Man's Whoman, algunos increíbles solos de saxo de Helliwell y poco más. Lo demás, desde mi punto de vista, ha ido de lo meramente digno a lo absolutamente decepcionante.

Rick Davies-Supertramp, constituye hoy en mi vida un periodo acabado y cerrado. Hoy ya sé con toda seguridad que lo que queda de Supertramp está en Roger Hodgson.

No pretendo crear polémica. Simplemente, me he sincerado con vosotros y os he dicho como percibo y siento a Rick Davies-Supertramp después de este concierto. Respetaré que otras personas sientan de manera diferente. Por tanto, espero que nadie se moleste por este comentario. Bastante tengo encima con el disgusto que me he llevado.

Un abrazo.