Entrevista de Roberto Terne a Roger Hodgson, aparecida en el periódico "El Norte de Castilla" el mismo día de su concierto en Valladolid.

 

El Patio de la Hospedería de San Benito presentará hoy a todo un nombre del firmamento del rock. Roger Hodgson, cerebro y voz de Supertramp durante los quince primeros años del grupo británico, actuará en el ecuador de esta programación. Todo un lujo que promete repasar sus mejores temas.


PREGUNTA: Hay bastante expectación con su visita a Valladolid… ¿Qué puede esperarse en un concierto del que fuera líder de Supertramp?

ROGER: La gente escuchará canciones que he escrito durante toda mi trayectoria. Puedes esperar escuchar 'Dreamer', 'The logical Song', 'Give a little bit', 'Breakfast in America'... Así como algo de mi último material. Puede que también alguna novedad que todavía no he grabado. De cualquier manera, la gente amará el show. Mi voz está más fuerte y mejor que nunca. Sé que el público pasará un gran rato y por supuesto yo también.

PREGUNTA: ¿Qué le debe la música a canciones como las que ha mencionado?

ROGER: Mis canciones fueron y son algunos de los éxitos que mucha gente amó y que todavía hoy sigue adorando y escuchando. Fui el líder de Supertramp y el responsable de muchos de sus arreglos y producciones. Supertramp fue mi pasión durante catorce años y creo que cuando la gente escucha mis canciones también escuchan el espíritu y el alma de Supertramp.

PREGUNTA: ¿Con qué se queda de toda su época en Supertramp?

ROGER: Mis mejores recuerdos están en la época de la creación de 'Crime of the century'. Recuerdo cuando partí para unas largas vacaciones en Marruecos durante más de dos meses. Al volver a Inglaterra y bajar del avión pude leer en la prensa musical que 'Crime of the century' era número uno. En realidad no tengo ningún mal recuerdo de la banda. Incluso las dificultades a las que nos enfrentamos creo que fueron buenas para nosotros.

PREGUNTA: ¿Qué es lo que le impulsa a seguir todavía en la música?

ROGER: Tengo un legado musical que ha sido la banda sonora de la vida de mucha gente. Cada noche desde el escenario veo las sonrisas o las lágrimas en la cara de la gente cuando una de mis canciones les recuerdan a un momento de sus vidas. Me siento muy afortunado por tener un trabajo y un talento que pueden hacer a la gente feliz. Sé que esto no va a cambiar el mundo pero, sí puedo llegar al corazón de alguien, alegrarle el día, ayudar a la gente a volver a casa sintiéndose un poco mejor con su vida... Entonces habré triunfado.