Programa especial de la emisora de radio francesa "RTL2" que repasaba la trayectoria de Supertramp y contaba con la intervención de Rick Davies y John Helliwell.

RICK: Hola, soy Rick Davies, de Supertramp.

JOHN: Emitiendo en RTL2 con "La historia de Supertramp".
 
PREGUNTA: Antes del álbum "Breakfast in America", Supertramp se trasladó desde Inglaterra hasta California. ¿Por qué decidisteis cambiar de residencia?
 
JOHN: Bueno... Al principio fue por un accidente. ¿Te acuerdas, Rick? Porque cuando estábamos con la gira del "Crime of the century", Roger se rompió un dedo. Estábamos jugando junto a la carretera de camino a un concierto y se rompió un dedo, así que no pudimos seguir con la gira. Nos fuimos directamente a Los Angeles. La mujer de nuestro representante era de allí, y el batería también, así que nos fuimos allí, nos instalamos y empezamos a grabar nuestro siguiente disco.
 
RICK: "Breakfast in America" es un álbum que surgió de forma muy sencilla. Por alguna razón, todas las canciones parecían fluir de forma sencilla.
 
JOHN: De hecho, la canción que da título al disco fue escrita por Roger mucho antes de que conociera a Rick, creo que cuando era estudiante. Pero encajó muy bien porque llevábamos un par de años viviendo allí, y también encajó en la colección de canciones que estábamos haciendo.
 
PREGUNTA: En 1982 fue publicado el éxito "It's raining again", del álbum que la gente interpretó como último de Supertramp debido a su título, la conocida frase "Famous last words"...
 
RICK: Bueno, entiendo que la gente pensara eso. La única razón para llamar al álbum así fue que esa fue la mejor frase que se nos ocurrió. Era una frase potente y, por supuesto, también estaba la portada del disco con la cuerda y las tijeras. La gente podría interpretar muchas cosas a partir de eso. Fue también una imagen potente.
 
PREGUNTA: Roger Hodgson dejó el grupo despues de "Famous last words". ¿No parecía un poco una premonición?
 
RICK: Subconscientemente, sí.
 
PREGUNTA: "Cannonball" fue el éxito de Supertramp en 1986. Rick, ¿no pensaste en una carrera en solitario como la de Roger Hodgson?
 
RICK: "Cannonball" se extrajo de "Brother where you bound", el primer álbum sin Roger. No, pienso que habíamos decidido seguir como grupo incluso aunque Roger se marchara. Me apetecía ver cómo podíamos hacerlo con sólo cuatro de nosotros.
 
JOHN: Todo aquel álbum es más serio, demostrando que Supertramp también tiene un lado serio. No todo tiene que ser frívolo, me gustaba aquella dirección. Era un interesante camino a seguir.
 
PREGUNTA: En 1976 el éxito de Supertramp fue impulsado por el lanzamiento de "Give a little bit", del álbum "Even in the quietest moments". La portada del disco muestra un piano entre la nieve. ¿Quién decidió hacer esto y por qué?
 
RICK: Buena pregunta. La verdad es que no es una foto trucada. Lo único que sé es que realmente subieron un piano hasta las montañas, aunque no te lo creas, y esperaron durante una noche a que la nieve se posara sobre él. Eso es lo único que sé, probablemente lo hacemos mejor en el estudio (RISAS). Por entonces teníamos esas ideas. Supongo que fue porque grabamos el disco en Caribou, en Denver, rodeados de montañas.
 
PREGUNTA: ¿Sabéis cuántas copias se vendieron del álbum "Breakfast in America", y especialmente del single "The logical song"?
 
RICK: Esas cifras son increíblemente difíciles de entender. Creo que la cosa estaba en unos catorce millones de copias en todo el mundo.
 
JOHN: Sí, porque se supone que hemos vendido cincuenta millones en total, así que debe ser por lo menos eso.
 
PREGUNTA: ¡Eso es casi una copia por cada persona en Francia! Pero evidentemente esos cincuenta millones se refieren a todo el mundo. Pero hubo una época en Canadá en que todo el mundo tenía...
 
RICK: ...Uno de cada tres o cada cinco o algo así...
 
JOHN: Sí... Una de cada tres personas en ese país tenía algún disco nuestro. Eramos increíblemente populares.
 
PREGUNTA: John, tú entraste en el grupo para el tercer álbum, "Crime of the century", en 1974. Antes de escuchar "Dreamer", de aquel álbum, dinos por qué decidiste entrar en el grupo cuando sus dos primeros discos no habían triunfado.
 
JOHN: Ellos eran bastante raros pero me encantaban las canciones que tocaban, y me gustaba la gente. Eran todos buenos tipos con los que trabajar.
 
RICK: La primera vez que abrió la boca fue para contarnos un chiste. No dijo "hola", ni nada parecido, simplemente contó el chiste. No sé si lo entenderás pero ¿te sabes el del irlandés que...
 
JOHN: ...se compró unos esquís de agua y estuvo seis meses buscando un lago que tuviera pendiente?
 
PREGUNTA: ¡Ah, sí, nosotros contamos el mismo, pero sobre belgas!
 
RICK: (RISAS) Muy bien, será mejor que lo dejemos...
 
PREGUNTA: En 1983, el éxito de Supertramp fue "Don't leave me now", del álbum "Famous last words". ¿Fue difícil hacer el disco, después de "Breakfast in America"?
 
RICK: Por supuesto, fue un desafío. Quiero decir que las expectativas de la compañía de discos eran que alcanzáramos las ventas de "Breakfast in America", y lo demás no importaba. Un grupo consigue un gran disco como ese tal vez una vez en su carrera, no siempre. Pero "Don't leave me now" es una de mis canciones favoritas de este...
 
JOHN: Sí, hay un gran sonido de la batería en ella, ¿verdad? Grabamos el álbum en dos lugares. En los estudios de Roger en el campo y también en Los Angeles. Ibamos de un sitio a toro, porque Roger decía "venid a grabar en mi estudio" y Rick decía "yo no quiero ir allí, quiero grabar aquí en Los Angeles". Así que tuvimos que comprometernos (RISAS).
 
PREGUNTA: Entre 1979 y 1980, ¿os sorprendió el éxito del álbum y del single "Goodbye stranger"?
 
JOHN: Sí, era muy extraño. Cuando el álbum y los singles eran número uno, nosotros estábamos de gira. Veíamos cómo iban las ventas y era increíble. Cuando acabamos la gira, aquel entusiasmo se apagó...
 
PREGUNTA: ¿Cuánta gente hubo en vuestro primer concierto en París de 1974, en el Bataclan?
 
JOHN: Bueno, yo digo seis personas, Rick dice quince.
 
RICK: Hubo seis que pagaron, y quince, o sea, nueve que no.
 
JOHN: Ya sé, probablemente era gente de la compañía de discos.
 
RICK: No había mucha gente.
 
JOHN: Fue divertido, y nunca me lo han confirmado, pero creo que grabamos aquel concierto... para una emisora de radio. Pero nadie ha venido nunca a decirme que tiene una copia.
 
PREGUNTA: Podrías buscarla... Podemos preguntar a la gente...
 
JOHN: ¡Sí! Si consigues una copia, mándamela.
 
RICK: Sería interesante oir la reacción del público después de cada canción...
 
JOHN: Sí, sería algo así (APLAUDIENDO Y EN VOZ BAJA): "bravo, bravo" (RISAS). ¡Hicimos un bis! Sí, Roger insistió en que hiciéramos un bis, y unos años después tocamos en el Parc de Seaux ante ochenta y cinco mil personas. ¡Qué exageración!
 
PREGUNTA: Tras los dos primeros discos, ¿cómo alcanzasteis el éxito después de 1974?
 
RICK: Bueno, fue un gran punto de retorno para nosotros. Decidimos tomar una nueva dirección, con una música más dramática, y decidimos también hacernos más dramáticos en los conciertos, con una iluminación que ilustrara las canciones, y empezamos a usar la pantalla con las películas, lo que impactó a la gente de inmediato. Creo que la primera vez que lo hicimos fue en Inglaterra, en la Universidad de Nottingham. Fue la primera vez que empezábamos a oscuras con la armónica de "School" y la gente se sorprendió. Esto era algo muy dramático y alguien decidió que desde entonces debíamos seguir por ese camino.
 
PREGUNTA: En 1997, Supertramp regresó con el single "You win I lose". ¿Cómo volvisteis a reuniros de nuevo?
 
RICK: Bueno, yo iba a hacer un álbum en solitario, así que me pasaba mucho tiempo en mi estudio componiendo. Pensé que tenía una buena colección de canciones y que sonaban mucho a Supertramp, especialmente "You win I lose". Pascal Bernardin, que es nuestro promotor en Francia, creía que todavía había mucha gente que quería ver al grupo, y nos convenció para hacer una gira, volviendo a formarnos, y la combinación de músicos era exactamente la que yo quería. La química en el grupo fue muy buena.
 
JOHN: Sí, nos pusimos a ensayar y todos encajamos de forma natural. Fue como encontrar un traje antiguo, ponértelo y comprobar que te queda bien.