Visto: 2163

José E. Gómez, de la revista musical española "Indyrock", entrevistó al saxofonista de Supertramp al comienzo de su gira mundial 2002.

Desde que en 1969 Supertramp se formara en la ciudad de Ginebra, el pop-rock ha cambiado. La evolución le ha llevado a sonidos más electrizados, tecnológicos y hacia el mestizaje. Tres décadas después, Supertramp, la banda creada y liderada por Rick Davies, se mantiene en esquemas muy similares.

Creen que la música de los 70 era más real. No necesitaba de alardes tecnológicos. Eran músicos de verdad, con instrumentos reales. Los miembros de Supertramp afirman que el concierto de Granada será un repaso por casi la totalidad de su discografía. Los viejos temas estarán mezclados con las nuevas composiciones de “Slow Motion”, un disco que aparecía tras cinco años de aparente inactividad.


PREGUNTA: ¿Qué aportan las nuevas tecnologías a “Slow motion”?

JOHN: Creo que la única nueva tecnología que hemos utilizado ha sido ProTools, en lugar de grabarlo directamente en una cinta como siempre hacíamos. Nos hemos aprovechado del sistema informático que consigue la grabación sea muy limpia y sencilla. Aparte de esto no hay ninguna tecnología espectacular, simplemente músicos y una grabación como las de antes, simplemente que no está grabado en un “master”.

PREGUNTA: Habéis comentado que el nuevo disco hace una crítica a la música actual, que está hecha de retales... ¿Ya no existen creadores?

JOHN: No lo criticamos. No le prestamos demasiada atención a la nueva música, hay algunas cosas que nos gustan sin embargo. Simplemente debe ser una moda de ahora. Creo que ahora hay vocalistas femeninas muy buenas. No bailamos, así que quizá vamos un poco perdidos en cuanto a lo que se hace hoy en día. Pero no me importa demasiado ser crítico o no serlo con la música de ahora.

PREGUNTA: ¿Cómo son los conciertos de esta nueva gira? 

JOHN: Hacemos cuatro, cinco o seis canciones de nuestro nuevo disco, y también tocamos alguna canción de cada disco de los que hemos hecho. Nuestros conciertos cubren todas las épocas y etapas de Supertramp. Así pues habrá algunas cosas nuevas pero también habrá algunas de las cosas antiguas que la gente quiere ver. El de Granada será un “show” que cubrirá toda nuestra carrera.

PREGUNTA: ¿Refleja la portada del álbum la soledad del individuo en la sociedad actual?

JOHN: Sí, podría ser. Pero la idea es que las cosas van demasiado rápidas, todo el mundo quiere que su Internet vaya aún más rápido, o que su teléfono móvil sea mejor... Y a veces la gente no consigue comunicarse, y tampoco aislarse de lo que imponen los medios de comunicación, de todo el bombardeo de información al que están expuestos. Yo vivo en un sitio muy aislado y uso Internet a veces para comunicarme con gente, pero no soy un gran usuario. Porque simplemente me gusta estar tranquilo y disfrutar de la naturaleza que me rodea y también me gusta leer, lo que queda reflejado en la portada del disco. Y Rick también es como yo, Rick tampoco sabe mucho de tecnología, no creo que tenga teléfono móvil ni que sepa usar un ordenador. Simplemente es rebajar el ritmo de vida y disfrutar más de la vida.

PREGUNTA: La mayoría de las grandes bandas no suelen hacer giras tan largas, sin embargo Supertramp tiene una gira enorme. ¿No estáis cansados de la carretera?

JOHN: Sí, a veces nos cansamos, pero es que estamos aquí para tocar nuestra música, conocer países, conocer a gente. Si te cuidas puedes disfrutar mucho de las giras. No vamos tanto de gira como para cansarnos o aburrirnos de ello. Cuando lo hacemos son giras largas, pero ya hace cuatro años de la última, así que era hora de volver a ello. Tenemos muchas ganas de volver a empezar, nos lo pasamos muy bien juntos, mis compañeros de grupo son también mis mejores amigos. Me gusta pasar tiempo con ellos, pasear con ellos por las ciudades y después hacer el concierto...

PREGUNTA: El sonido de los 70 está cada día más de moda y hay bandas en la actualidad que lo están potenciando... ¿Es la mejor década para la música?

JOHN: Sí, creo que la música de finales de los 60 y los 70 es insuperable. Y una de las razones es que es gente real tocando música real. Y no está basada en la tecnología, pues eran simplemente músicos, compositores, escritores... Expresaban una emoción que aparece en esa música porque está hecha por gente real. Somos muy afortunados al ser un grupo bastante intemporal, todo tipo de estilos han ido y venido y nosotros somos lo que somos y la gente lo aprecia. Cuando la gente viene a vernos y nos encontramos gente joven, les fascina ver que realmente tocamos, que somos músicos de verdad. Somos una de las bandas que realmente toca y es una gran banda para ir a ver.

PREGUNTA: ¿Hacia dónde camina el pop-rock en el siglo XXI, hacia el mestizaje de estilos o se consolidarán los sonidos de siempre?

JOHN: Es difícil de saber, al principio la gente parecía que se estaba subiendo al tren de la música digital, baterías sintetizadas y sintetizadores... Pero después se volvieron a usar baterías y pianos de verdad otra vez. Creo que va a volverse a los músicos de verdad, a los artistas de verdad, quizá incluyendo algunos de los avances tecnológicos. El ProTools está muy bien y todo eso, pero sigue sin sonar tan cálido y profundo como el vinilo por ejemplo, pero no sé si se va a volver a la grabación analógica. Es difícil de predecir, yo deseo que los músicos sigan siendo vitales y que la música siga siendo algo expresado por una persona real.

PREGUNTA: ¿Cómo se ven, desde la óptica de un gran grupo, los movimientos independientes?

JOHN: Creo que es muy importante que existan los sellos independientes para dar oportunidades a los jóvenes artistas. La industria musical se ha convertido en tres o cuatro empresas gigantes en las que nadie tiene una oportunidad para triunfar. Y si nosotros hubiésemos aparecido en el clima de hoy ya nos habrían echado del sello. Nos costó tres discos tener éxito. Las bandas jóvenes no tienen esas oportunidades para crecer, ganarse un público y quizá cometer algún error, simplemente los echan. Así que es fundamental que tengan una oportunidad de ser escuchados.

PREGUNTA: ¿Los años y la experiencia os han hecho más sosegados en las composiciones?

JOHN: Seguramente es verdad, lo hablábamos el otro día. Creemos que tocamos mejor que nunca, tenemos un enfoque mucho más relajado, todos somos muy maduros y tranquilos, estamos en un momento de nuestras vidas en que los hijos ya han crecido, así que nos podemos concentrar muy bien.

PREGUNTA: ¿Qué se siente cuando veis frente al escenario a varias generaciones vibrando con vuestra música?

JOHN: Es fantástico, nos hace saber que aún somos un grupo vital, y que aún llegamos a la gente. Es fantástico que nos hayan descubierto las nuevas generaciones y también es genial es que los fans del grupo hayan aguantado con nosotros tanto tiempo, que no les hayamos decepcionado.

PREGUNTA: “Slow motion” contiene las primeras canciones de Supertramp después de cinco años. ¿En qué se diferencian del sonido Supertamp de siempre?

JOHN: Este disco parece un poco más “jazzy” o “bluesy”, hay dos o tres canciones largas en las que Rick explora diferentes estilos de arreglos. Siempre hemos sido fans de Traffic y ellos siempre tenían canciones instrumentales con arreglos muy interesantes. Se trataba de experimentar con todo eso. Hay un par de canciones que son el típico estilo Supertramp, como "Bee in your bonnet", que me recuerda a la época de "Crisis? What crisis?", por los acordes de Rick y eso. Así que creo que conservamos el estilo Supertramp y nunca lo cambiaremos porque es como somos. Pero intentamos expandirnos con las experimentaciones que incluye Rick de vez en cuando.

PREGUNTA: Canciones como “Tenth avenue breakdown”, “Broken hearted” y “Dead man’s blues”, ¿pueden considerarse épicas?

JOHN: Son simplemente experimentales, es como Rick compone a veces. Pero no las consideramos épicas. Para nosotros simplemente son nuestras canciones, dejamos libertad respecto a cómo la gente quiera describirlas.