Artículo de Pete Makowski publicado en la revista musical inglesa "Sounds" en el que se hace un completo repaso a la historia del grupo hasta la publicación del álbum "Crisis? What crisis?".

Dos años y dos meses, ese es el tiempo que llevan juntos los chicos de Supertramp, lo creáis o no. Dos años y dos discos sensacionales (`Crime of the century' y `Crisis? What crisis?'). Supertramp ha incluido su nombre en un mercado que está literalmente buscando a gritos la calidad. Eso es lo que son ellos: un grupo de calidad que 
se ha impuesto un nivel muy alto que mantienen continuamente.

Supertramp son: Rick Davies (teclados y voz), Roger Hodgson (guitarra, teclados y voz), Dougie Thompson (bajo) John Helliwell (saxofón y varios instrumentos) and Bob C. Benberg (batería). Pero Supertramp ya lleva mucho tiempo por aquí, esta configuración es la culminación de años `pagando deudas'. Abordé al grupo al final de su gira, y ellos reflexionaron sobre las hazañas que han pasado hasta unirse musicalmente.

LOS COMIENZOS
The actors and jesters are here (Los actores y cómicos están aquí)
The stage is in darkness and clear (El escenario está oscuro y vacío)
For raising the curtain (Para que se levante el telón)
And no one's quite certain whose play it is (Y nadie sepa de quién es la obra)

La historia comienza con Rick Davies, que inició su carrera profesional con The Lonely Ones, una banda de Folkstone antiguamente liderada por Noel Redding. "Trabajamos en Inglaterra unos seis meses", cuenta, "y después nos fuimos a Europa supuestamente para dos semanas pero nos quedamos allí... ¡no volvimos en un año y medio!".

Finalmente el grupo se quedó desamparado en Munich. "Dábamos conciertos por la noche y hacíamos música para películas por el día. Fue una buena experiencia pero los alemanes hacen las peores películas del mundo. Para ellos éramos una forma barata de poner música en sus películas. Trabajábamos para un tipo llamado David Lluellyn, que era un personaje increíble que conocimos allí. El solía conseguirnos todos esos trabajos para las películas".

"Estábamos en la ruina cuando Dave mencionó que conoció a un tipo en Suiza que era millonario. Pensamos `seguro que no le interesa', pero merecía la pena intentarlo. Estábamos desamparados en el Club PN, viviendo en apuros. Tocando los fines de semana conseguíamos dinero para llegar hasta el jueves, y después teníamos que apañárnoslas hasta el sábado".

"Fue un sábado cuando Dave se fue para ver a ese tipo y después dejó de dar señales de vida durante tres meses, así que pensamos `ya está, se ha marchado'. Entonces recibimos una llamada telefónica de Dave diciendo que el tipo estaba interesado en vernos. ¡No podíamos creerlo! Estábamos todos deambulando como en un sueño pensando `ya está'".

Y ALLI ESTABA SAM
El hombre al que Dave se refería no era otro que Sam, el millonario holandés a quien está dedicado `Crime of the century'. Sam fue el responsable de hacer aquello posible.

Rick: "El tenía la idea de que cogiéramos temas clásicos y los convirtiéramos en música pop. Por supuesto, nos precipitamos todos hacia su casa y cuando estuvimos allí nos pasamos las dos primeras semanas jugando al ping-pong. Intentamos hacer lo que él quería. Eran unas ideas muy estrafalarias. Al final nos vinimos abajo y firmamos con Robert Stigwood y acabamos tocando en el Club Rasputin todas las semanas".

HASTA QUE UN DIA...
Rick: "Una mañana Sam me llamó por teléfono a las nueve y me dijo que echara un vistazo por la ventana. Yo le dije `ahí fuera no hay nada, salvo un viejo autocar' y él me dijo `es vuestro, muchachos'. Así que nos metimos dentro y Andy (nuestro cantante) dio una vuelta por Finchley mientras los demás jugábamos al fútbol en la parte de atrás. 
Fue cuando empezamos a tocar en Marquee cuando se convirtió en un problema. Teníamos que aparcar en Oxford Street y podías ver a una larga cadena de gente por Wardour Street llevando el equipo. De todas formas, no nos gustaba que algo no fuera del agrado de Sam. Yo me conmovía al verle afligido".

Se supo que Sam pensaba que el grupo no estaba alcanzando sus expectativas. "Yo sabía que el grupo no era bueno, pero a todos se nos partió el corazón cuando tuvimos que separarnos, estábamos muy unidos". Al parecer, el millonario holandés reconoció el talento como compositor de Davies y le convenció para que se quedase bajo su tutela.

For we dreamed a lot (Pues tuvimos muchos sueños)
And we schemed a lot (E hicimos muchos planes)

"Sam me convenció para que intentara escribir mi propia música, así que conseguí la suficiente confianza como para quedarme allí y empezar a componer. Por supuesto, de Sam surgieron todo tipo de locas ideas, como `Rick por todo el mundo en ochenta canciones', por la cual alquilaríamos unos cuantos aviones e iríamos por todo el mundo".

"Nos quedaríamos en un pueblo de Afganistán y nos dejaríamos influenciar por la música y después iríamos a otra parte. Sonaba fantástico pero no era real. Así que regresé a Londres y empecé a hacer las audiciones para lo que sería la primera configuración de Supertramp".

If we'd known just how right we were going to be (Si hubiéramos sabido lo bien que íbamos a estar)

ENTRA ROGER HODGSON - JUVENTUD FRESCA DE LA ESCUELA DE STOWE
Hodgson es pálido, delgado, con rasgos casi de halcón. Se le ve tanto sentado como detrás de una guitarra, exprimiendo cada onza de emoción en cada verso que canta. Es un completo contraste con el frío Davies y su cara redonda, quien sólo rompe ocasionalmente su aspecto inexpresivo con una mueca o, fuera de escena, con un estallido de su risa estridente. Ambos forman el blanco y el negro del equipo de compositores de Supertramp.

Mientras Hodgson pasea por el escenario con caftán y vaqueros, Davies está al otro lado con un traje y una camisa, pareciendo un moderno Irving Berlin. Ambos igual de intensos, ambos igual de talentosos, ambos igual de diferentes. Es difícil sorprenderse de que uno de los ídolos de Hodgson sea Steve Winwood. Los dos son vagabundos del viento, eternos creadores de música, viviendo su propia época, su propia realidad.

"Cuando me uní a Rick había firmado un contrato con otro tipo el mismo día", admite un hablador Hodgson. De hecho había sido contratado por DJM para grabar un single bajo el nombre de Argosy.

"En el single aparecía Elton John al piano, Nigel Olsson a la batería y Caleb Ouaye a la guitarra... fue un fracaso... A Tony Blackburn le gustaba".

Cuando Hodgson entró en Supertramp, su instrumento principal era el bajo. "Aunque parezca extraño, ese es mi instrumento favorito. Me encanta el bajo más que ningún otro instrumento".

Davies escogió a Richard Palmer (que había compuesto anteriormente algunas letras para King Crimson) para la guitarra y a Bob Millar para la batería, completando la primera configuración de Supertramp.

Rick cuenta: "Hubo un gran cambio durante la época que yo estuve en Europa. Ese cambio se refería a Traffic, Jethro Tull, Spooky Tooth y bandas de ese estilo, pero no lo supe hasta que fui a ver a Rory Gallagher y Taste en el Liceo. Sólo entonces me di cuenta de que había posibilidades de que pasara algo, porque yo no me veía a mí mismo como una gran estrella del pop ni pensaba ir a ninguna parte para ser así. Pero con la llegada de los nuevos grupos, hubo una nueva corriente que seguir y hacia allí nos dirigimos".

"Roger, Richard y Bob conocían bien esos grupos, así que tenerles en la banda fue una especie de educación para mí. Fue estupendo porque a Richard Palmer le iban Traffic y The Band, y se estaba introduciendo en sus letras, y yo nunca había pensado en esas letras".

Supertramp firmó con A&M y publicó su primer álbum en 1970. Fue descrito en las notas del segundo álbum como de un "carácter melancólico". El disco indica vagamente letras con intención, pero sin dejarlas claras del todo. No es un disco inicial memorable, pero sí interesante.

Rick: "Estábamos muy verdes por entonces. También estaba lo de que no teníamos productor. Entonces los grupos no usaban productor, así que decidimos no tener uno. `Paul McCartney no utiliza productor, ¿por qué vamos a hacerlo nosotros?' (se echa a reir histéricamente). Me refiero a esa clase de inexperiencia". "El primer álbum", sostiene Roger "tenía su propio tipo de magia".

ES UN LARGO CAMINO
Rick: "Ese primer año debimos tocar para muchísima gente. Ibamos a toda velocidad, eso era lo que nos mantenía vivos".

Roger: "Nuestro primer álbum se vendió bastante bien".

Rick: "Sí, es verdad. De hecho, casi fue un despegue, porque tocamos una vez en el Canódromo de Croydon para mucha gente, después de que Bob se marchara y todo se podría haber ido a pique".

Roger: "En ese primer año estuvimos juntos en una casa de campo, no nos relacionábamos socialmente y aquello era realmente malo. Nunca hacíamos amigos y la gente odiaba venir a la casa".

VOLVER A INTENTARLO... EL SEGUNDO ALBUM
Rick: "También lo hicimos por nuestra cuenta. El segundo álbum consistió en un grupo diferente. Por entonces Richard Palmer y Bob Millar se habían marchado. Metimos a un tipo llamado Dave Winthrop al saxofón, a Kevin Currie a la batería y a Frank Farrell al bajo".

El segundo disco, titulado `Indelibly Stamped' (con una portada en la que aparecía el cuerpo de una mujer desnuda adornado de tatuajes), tuvo un esfuerzo mucho más sustancioso que su predecesor, mostrando 
un tema sobre otro en estratos musicales, un sonido no muy diferente del de Traffic. La misma sensación.

¿Los conciertos en directo? Bueno, esa fue otra historia...

Rick: "Realmente se trataba de rock and roll. Solíamos hacer que la gente subiera al maldito escenario y aquello era un caos, llegando a hacer hasta tres bises, pero detrás de aquello había carne con patatas. No iba a venir más o menos gente al siguiente concierto".

Después vino la siguiente marcha. Farrell siguió su propia carrera y acabó uniéndose a Leo Sayer, mientras que el escocés Dougie Thomson entraba en escena. Como el resto de la banda, Thomson es un personaje bastante sencillo. En el escenario puedes verle dando botes, sacando esas punzadas de líneas de bajo que se han convertido en una parte esencial de Supertramp.

"Cuando me uní a Supertramp había estado unos seis meses tocando en algunos clubs raros del West End (un barrio de Londres). Toqué un poco el el grupo de Alan Bown. Fue una época extraña en la existencia del grupo, cuando se deshicieron de Alan e intentamos salir adelante, pero la verdad es que no conseguimos arreglar nada en absoluto".

"Así que estaba buscando un trabajo con el que ganar algún dinero y vi el anuncio de Supertramp. Mi hermano, que ahora viaja con nosotros, había estado alguna vez en Londres y había comprado uno de sus discos. Así que yo les conocía. Decidí acudir y ver qué pasaba. 
Entonces contemplé en la audición algunas escenas increíbles. Recuerdo que fui al Pied Bull en Islington y vi un panorama terrible. 
Rick tenía puesto un casco en la cabeza y estaba durmiendo. Dave Winthrop se había dado por vencido y se había ido a jugar al pinball. 
Roger y Kevin intentaban que aquello se pareciera a una audición. Así que llegúe, toqué mis dos minutos y me marché".

Y ENTONCES...
"Roger me llamó por teléfono un par de días más tarde y me pidió que me fuera a vivir a su casa para ver que podía salir de allí. Fue una época muy rara para el grupo, con Dave Winthrop. A veces no venía a los conciertos, y después volvía un para de conciertos más tarde como si nada hubiera pasado... Muy extraño".

Rick: "Hicimos un concierto en Swansea en el que el batería no se presentó. Así que Roger y yo nos repartimos entre ambos las tareas en la batería, porque necesitábamos la pasta si no queríamos morirnos de hambre. No nos salió muy mal".

Dougie: "Hasta el final de esta configuración del grupo hicimos algunos conciertos con Frankie Miller".

Lo cual nos conduce a la llegada de Bob C. Benberg desde Los Angeles, quien en esa época tocaba la batería con un grupo infame de rock de pubs, Bees Make Honey. "Fue la época en que Frankie había grabado un disco con The Brinsleys, de hecho por eso nos presentaron", explica Bob. "Frankie solía acercarse por el Tally Ho y a veces subía al escenario y tocaba con nosotros un par de canciones. Cuando tenía que marcharse a trabajar, nos decía que fuéramos con él, e hicimos unos tres conciertos como teloneros de Supertramp. Uno de ellos fue en Streatham, yo todavía no conocía al grupo, pero reconocí a Dougie porque le había visto tocando con Alan Bown Set en el Canódromo unos tres meses antes, y lo único que recordaba del grupo, además del saxofón negro que llevaba el saxofonista, era que el bajista se movía bastante por el escenario".

"Después recordé que otro día paseando había visto a un tipo tocando la batería y había pensado `eh, suena bastante bien', y 15 minutos después el batería se fue". El tipo que Bob había visto era Rick, que empezó su carrera musical como batería. "Unas semanas después estuvimos en Barbarella's, en Birmingham, como teloneros de Supertramp. Tocamos nuestro repertorio y después todos se marcharon, salvo el pianista y yo, que nos quedamos a ver a Supertramp. Eran muy buenos. Era el primer grupo que yo había visto que tuviese clase, y pensé que podía tocar con ellos. Después de aquello empecé a hablar 
de que eran muy buenos. Eran lo más parecido a Traffic que yo había visto, tenían gancho..."

"En aquella época tocábamos algo del segundo álbum y bastante del `Crime of the century'", añade Rick, "versiones completamente diferentes".

Bob: "La siguiente vez que les vi fue cuando estábamos dando un concierto en Barnet y vi a su batería sonriéndome. Unas dos semanas después Roger se me acercó en Kensington y me dijo que iban a hacer un nuevo álbum en Septiembre y su batería se marchaba, que qué me parecía hacer algunas sesiones para ellos".
Esto era algo completamente diferente para los Bees.

Bob: "En los Bees nunca había ensayado. Nunca ensayábamos. Con Supertramp era diferente, el polo opuesto. Recuerdo la primera vez que nos juntamos en el Furniture Cave de Kings Road".

Rick: "Nunca había escuchado a un batería tan estrepitoso en mi vida. Lo único que oía eran los platillos".

Bob: "Sí, pero sonaban bien, ¿eh?

Mejor que bien. El trabajo de Bob a la batería, unido al de Dougie al bajo, constituye una parte incalculable y distinguida del sonido de Supertramp. De alguna forma consiguen soldar a Davies y Hodgson en un formato accesible. Ahora que la sección de ritmo estaba solucionada, quedaba algo más por hacer.

ENTRA JOHN ANTHONY HELLIWELL
Cuando Dave Winthrop dejó de asistir a los conciertos, el grupo se reunió y decidió su siguiente movimiento. De repente, Dougie recordó a su antiguo compañero en Alan Bown Set, aquel al que Bob se refería como el hombre del saxofón negro). John Helliwell, el músico y cómico del grupo. Dougie le llamó por teléfono inmediatamente para enterarse de que su amigo soplador de lengüetas estaba en Alemania, un lugar ideal para la formación de músicos. De hecho, John estaba haciendo las bases de viento en una banda multi instrumental.

Dougie: "Así que estuvimos un poco atascados durante un par de semanas, sin un recambio, y entonces llegó John". Le llamé y le pedí que viniera a tocar algo. Por entonces estábamos trabajando en los antiguos estudios de Manfred Mann en Old Kent Road, y John se presentó allí".

Rick: "Tocó un poco, luego se sentó y hubo un silencio de unos 20 segundos. Después contó su chiste del irlandés que consigue unos esquís de agua en Navidad y se pasa el resto del año buscando un lago que tenga pendiente. Y todos nos sentamos y yo pensé `¿quién es este?'".

John Helliwell es uno de esos cómicos naturales que tiene a su alrededor una atmósfera tranquila y lunática, tanto dentro como fuera del escenario. También es un músico increíble. Como Dougie le describió una vez, "es el hombre que puede tocar cualquier cosa que tenga entre las manos".

Helliwell puede llevar a cabo cualquier tarea musical y parecer totalmente relajado. La música de Supertramp tiene un cierto toque de dramatismo. Helliwell contrarresta esto, evitando que lo que podría ser ostentoso se convierta en brillante. También es un as.

John: "Me fui a casa después de tocar con ellos y mi mujer me preguntó qué me había parecido, y yo le dije `bastante bien, pero creo que volveré mañana'. Después fui al día siguiente y al volver a casa ella me dijo `bueno, ¿qué tal ahora?'. Yo contesté `muy bien, pero tengo que volver otra vez', y las cosas continuaron de esa 
forma".

"Al mismo tiempo tenía que trabajar durante el día. Así que me enrolé con Manpower y el primer trabajo que tuve fue como mozo en una gasolinera. Después estuve en una fábrica de Maidenhead apretando tornillos y tuercas".

De hecho, casi todos los miembros del grupo tenían que mantener otros trabajos para sobrevivir.

Bob: "John me recomendó a un amigo suyo que tocaba en un grupo en el Hotel Park Towers en Knightsbridge y toqué con ellos. Tenía que hacer gran cantidad de solos y a veces tocábamos seis veces la misma noche, y yo tenía que hacer unos tres solos en cada actuación. Por si eso no fuera bastante, una noche, durante la segunda actuación, ¿sabes quién se presentó? ¡Carl Radle y Jim Gordon! ¡Se sentaron enfrente de mí! Intenté tocar lo mejor que pude pero... la verdad es que estaba muy nervioso".

Al pedirle al señor Helliwell un breve resumen de su carrera musical, inmediatamente contesta "llevas encima otras tres cintas magnetofónicas?", lo que indica que se trata de un muchacho con alguna experiencia a sus espaldas. Después le pido una versión corta de la historia de John Helliwell.

"Estuve con Alan Bown unos seis años, en los buenos y en los malos tiempos, y después cuando se separaron trabajé en algunos clubs. El primer trabajo que tuve antes de eso fue en una fábrica de limpieza en seco por el día y en el Club Celebrity por la noche. Entonces fue cuando se solucionaron mis problemas. Dejé la fábrica y el club y me fui a tocar con The Twilight Romos, donde trabajaba Dougie, y aproveché mi oportunidad... ¡Me uní a Jimmy Jonson y The Bandwagon! Después estuve con Arthur Conley y más tarde con Jimmy Ruffin. Cada uno de ellos era un peldaño más. Después me fui a Alemania y volví en Agosto para unirme a esto. Me dijeron que haríamos el álbum en Septiembre".

Bob: "Sí, a mí también me dijeron eso".

John: "Sí, con eso me engañaron a mí".

Bob: "Todavía no nos han pagado aquellas sesiones".

Dougie: "A ninguno nos pidieron que nos uniéramos al grupo. Veníamos, nos quedábamos y nadie nos decía que nos marcháramos".

¿CRISIS?
En algún momento de esta época (finales del 73), el grupo rompió su relación con Sam, con lo cual se les acabaron los lujos y se quedaron pelados. Especialmente Rick, que antes no tenía límite de tiempo para nada, aunque él señala: "Habíamos perdido mucho tiempo, teníamos el apoyo de ese hombre y su dinero, no teníamos prisa, nuestra vida no dependía de ello. Entonces pensé `nos vamos a hundir como una piedra'".

¿QUE CRISIS?
John: "Después de los ensayos en Old Kent Road, solíamos almorzar en Kew Bridge. Después A&M nos alquiló una casa de campo en Somerset, nosotros nos las arreglamos para conseguir quedarnos allí. Así que nos fuimos allí con las novias, las esposas, los niños y los gatos. 
Estuvimos allí unos tres meses intentando buscar entre todos un productor".

Una de las elecciones fue Ian MacDonald: "El no era la persona adecuada, es tan sencillo como eso", fue la conclusión a la que llegó el grupo después de que MacDonald les visitara. Entonces llegó Ken Scott, ya conocido por sus trabajos con David Bowie y The Mahavishnu Orchestra, por nombrar algunos. "Le pusimos a mezclar de nuevo un single nuestro que se llamaba `Land Ho', y nos impactó lo que hizo. 
Así que por fin firmamos un contrato para grabar en Febrero del 74. Fue el nacimiento de la terceraconfiguración de Supertramp.

RICK Y LA CASA
Rick: "Fue muy curioso cuando vivíamos en la casa grande de Holland Villas. En esta estuvo Joe Cocker y se suponía que el alquiler debían pagarlo entre cuatro personas, pero era astronómico, así que al final vivíamos doce allí. Había gente hasta en el tejado. Yo vivía en la bañera".

Rick: "Deberíais haber visto la escena cuando la dueña vino a recoger el alquiler. Nunca he visto nada igual. Vino sobre las 10 de la mañana, y le teníamos pánico. Sonó el despertador, me levanté, me puse un jersey y me largué. Estaba diluviando y me fui a pasear por Shepherds Bush. No tenía dinero para desayunar ni para nada, así que acabé por ahí como un vagabundo. Esperaba que todos se hubieran marchado cuando yo volviera. Me sorprendió que todos siguieran allí. Fue igual que en una comedia. La gente corriendo en pelotas de una habitación a otra mientras la dueña estaba por allí, había gente escondida por los armarios. ¡Fueron a mirar al desván y allí había tiendas de campaña!

La preparación del `Crime' fue mucho más tranquila en la casa de campo.

Dougie: "Teníamos una habitación en la parte de atrás donde teníamos el equipo y la sala de mezclas estaba en la cocina".

El grupo estuvo tres meses ensayando y después le dejaron algunas canciones a Jerry Moss (de A&M) para que las escuchase. "Afortunadamente le gustaron", dice sarcásticamente John, "debería haberse vuelto a América diciendo `que sigan con eso'".

Le pregunté a John si `Crime' fue un disco caro de producir.

"Bueno, con A&M ayudándonos porque no podíamos trabajar, resultó que teníamos que vender tres cuartos de millón de copias para cubrir los gastos, así que lo conseguiremos muy pronto".

Rick: "Ya casi lo hemos conseguido".

John: "'Crisis' fue más barato, pero no mucho más".

LOS PRIMEROS CONCIERTOS
La primera vez que Supertramp tocó con su formato actual fue en un concierto en Jersey para la fiesta de un caballero. Un amigo de un amigo de un amigo de un amigo del trabajo. "Estaba tan borracho que no podía tocar", recuerda Bob, "así que estuve intentando que se me pasara la borrachera, pero mientras tanto el resto del grupo se emborracharon tanto que no podían tocar".

La primera vez que el grupo toco `Crime of the century' fue en una reunión de A&M en el Teatro Kings Road. "Pasaron muchas cosas detrás del escenario, no te las creerías", dice John.

Rick: "Nunca habíamos trabajado con tanta iluminación, así que cuando bajaron las luces no veíamos nada. Y recuerdo que en una canción en concreto tuve que empezar a oscuras, no podía ver nada, así que no podía tocar, y las luces no se iban a encender. Así que nos tiramos al pozo y esperamos a ver qué pasaba".

Desde aquel primer concierto el grupo ha actuado en Gran Bretaña, Europa y Estados Unidos. Sólo han sido dos años y dos meses pero nadie puede acusarles de estar poco activos, y todavía les gusta tocar `Crime of the century".

Roger: "Me divierto más esta vez que la anterior".

Rick: "Pienso que nos ha llevado un tiempo estar por encima de todo, sin preocuparnos por los bultos ni los cables, así que de algún modo sales ahí relajado. Sólo hay un par de canciones que me preocupen técnicamente".

"Una vez que empiezas a estar por encima de todo, es cuando debes tener cuidado de no convertirte en autocomplaciente, cuando dejas de pensar `va a salir bien' y empiezas a pensar `va a ser igual que mear'. Sólo durante los últimos conciertos he pensado que esto no es nada, que puedo hacerlo fácilmente, pero pronto vuelves a bajar a la tierra".

Le pregunté a Rick qué le parecía la reacción de la prensa esta segunda vez.

"Esperaba algo un poco más duro con este álbum", dice refiriéndose a `Crisis', "lo contrario de lo que pensaba, esperaba algo mejor para `Crime' y no para este. Pero los periodistas son muy curiosos, sólo hay unos pocos en los que confías pero tarde o temprano te atacan diciendo cosas totalmente absurdas".

En `Crisis' aparece gran cantidad de material antiguo, nunca grabado anteriormente, lo que indica que el grupo se toma su tiempo componiendo, lo que no es sorprendente cuando te das cuenta de lo duro que trabajan.

"No ha habido un gran aluvión de composiciones", confirma Rick. "La verdad es que por lo que a mí respecta, no. Creo que Roger ha hecho algo más".

Dougie: "Componer parece más fácil para Roger, pues sólo necesita una guitarra, mientras que Rick necesita encerrarse en alguna parte con un piano".

Rick: "Necesitamos un descanso, para poder conseguir ideas frescas".

Dougie: "Nunca hemos parado, y pasarán un par de años de trabajo duro hasta que lo hagamos. Lo más importante es que la música quede bien. Si hace falta parar y reflexionar, entonces eso es lo que pasará".

Los chicos de Supertramp han llegado para quedarse.