Visto: 2526
El ex vocalista de Supertramp habla para Jorn Schluter, reportero de la edición alemana de "Rolling Stone", sobre algunas de las canciones más emblemáticas de la banda, recordando las distintas épocas en que fueron grabadas.

El hecho de que Roger Hodgson esté dando entrevistas para promocionar la reciente publicación de la antología de Supertramp, “Retrospectacle”, puede resultar sorprendente. Desde que Hodgson se despidió de la banda hace veintidós años, Supertramp es el vehículo de Rick Davies, la otra voz del grupo.
 
La separación entre ambos no fue demasiado amistosa. Hodgson no se llevaba bien con la mujer de Davies, lo cual afectó visiblemente a la banda, y todavía existen rencillas entre ellos. Aunque Hodgson conceda entrevistas para promocionar “Retrospectacle”, eso no significa que las relaciones sean ahora más calurosas. Hodgson no ha participado en el proceso de selección de canciones para el recopilatorio.
 
Hodgson ha recordado para “Rolling Stone” varias de aquellas famosas canciones, dando a la vez algunas pinceladas sobre la historia de Supertramp.

 
SCHOOL (1974)
“El comienzo de esta canción, con la armónica, establece el tono de lo que pretendía ser Supertramp en aquellos momentos. La canción contiene todas nuestras preocupaciones de entonces: un grito desgarrado desde el alma, los intentos por hacerte mayor, las preguntas que te haces de niño, nuestra evolución musical... Fue un momento mágico para todos nosotros, pues con ‘Crime of the century’ habíamos conseguido reunir a los músicos adecuados, encontrando por fin nuestro sonido”.
 
CRIME OF THE CENTURY (1974)
“Disponíamos de un gran presupuesto para grabar el álbum ‘Crime of the century’, y en el estudio nos encontrábamos igual que un niño en una tienda de golosinas. Al final tuvimos que hacer casi todas las mezclas utilizando muchos aparatos distintos, lo cual fue bastante complicado ya que por entonces no existía la tecnología actual y había que hacer muchas cosas a mano. Algunas partes del disco resultaron verdaderamente problemáticas y en ocasiones incluso teníamos que montar piezas de sólo diez segundos de música. ¡Algo increíble!”
 
RUDY (1974)
“Es una canción de Rick, un tema fantástico en el que todo encaja a la perfección. En realidad se trata de Rick cantando sobre sí mismo: Rick habla a través de Rudy, un tipo solitario y con un alma atormentada”.

TWO OF US (1975)
“Nos marchamos a California para grabar el siguiente álbum, y ya nunca regresamos a Inglaterra. Para cualquier adolescente inglés de la época, la costa occidental de América era una especie de paraíso. La preparación de ‘Crisis? What crisis?’ fue muy difícil, pues había una enorme presión sobre nosotros y apenas nos dieron tiempo para las grabaciones. Además, fue a partir de entonces cuando Rick y yo empezamos a componer por separado, algo parecido a lo que ocurrió entre Lennon y McCartney. ‘Two of us’ es una canción mía y contiene un sentimiento de esperanza reflejado en la música. También la canción puede tratar sobre Rick y sobre mí, pues ambos nos dedicábamos canciones mutuamente para decirnos cosas que éramos incapaces de expresar a nivel personal”.

THE LOGICAL SONG (1979)
“Componer esta canción fue bastante sencillo: un simple juego de buscar palabras que rimasen como ‘logical’, ‘liberal’, ‘sensible’… Pero tocarla en directo siempre ha sido mucho más difícil. El álbum ‘Breakfast in America’ tuvo un éxito demencial, y la gira posterior fue demasiado larga. El espíritu de la banda fue perdiéndose y dejamos de pensar como colectivo para empezar a pensar de forma más individual. También dejamos de divertirnos tocando juntos y fue un gran esfuerzo conseguir que las grabaciones para el álbum en directo fuesen buenas. Además, yo empecé a sentirme como un extraño dentro del grupo”.

IT’S RAINING AGAIN (1982)
“Es una canción muy simple, pero hay que tener en cuenta que nuestra situación no era la más adecuada. Rick y yo teníamos preparadas algunas canciones fantásticas para ‘Famous last words’, pero había tantas fisuras dentro de la banda que acabamos grabando las más sencillas para no complicarnos la vida. Muchas de esas grandes canciones fueron publicadas posteriormente en mis discos o en los de Rick. Grabar aquel álbum fue terriblemente complicado. Rick y yo estábamos casados con dos mujeres que tenían mucho carácter, y las cosas no funcionaron bien, sobre todo porque cada uno de nosotros tenía opiniones distintas sobre el futuro de la banda. Yo pensé que mi pasión por Supertramp ya había desaparecido y que era el mejor momento para marcharme”.