Manolis Georgakakis y Kostis Agrafiotis, de la web musical griega "Rocking", entrevistaron a Roger Hodgson poco antes de su actuación en Atenas correspondiente a su gira europea 2008.
Roger Hodgson hizo historia por ser uno de los líderes de Supertramp y el autor de la mayoría de los éxitos del grupo. Dos días antes de su primer concierto en Grecia, en el Teatro Badminton, nos concedió una entrevista en exclusiva.
Habían pasado pocas horas desde que fuese anunciada la cancelación del primero de los dos conciertos que tenía programados por problemas con el pasaporte de su saxofonista, Aaron MacDonald, pero Roger Hodgson contestó a todas nuestras preguntas con una amabilidad que es imposible expresar con palabras.
PREGUNTA: Este es tu primer concierto en Grecia. ¿Qué impresión te ha producido nuestro país y qué sientes al actuar ante el público griego por primera vez?
ROGER: Estoy entusiasmado. Tenía muchas ganas de venir a Grecia y lo había intentado varias veces, hasta que por fin hemos encontrado al promotor adecuado. Estoy muy contento de estar aquí, pues los griegos tenéis fama de tranquilos y sinceros. Hasta el momento me estoy divirtiendo mucho y estoy deseando actuar para vosotros.
PREGUNTA: ¿Guardas algún rencor por la cancelación del primero de tus dos conciertos a raíz de los problemas con el visado de Aaron MacDonald?
ROGER: No. Cuando me sucede algo así, me limito a pensar que siempre hay una forma de solucionar el problema. Creo que nuestros planes son volver aquí el próximo verano, y eso significa que actuaré otra vez en Grecia, lo que me hace estar más feliz aún.
PREGUNTA: ¿No crees que tus conciertos contribuyen en parte a mantener viva la memoria de Supertramp?
ROGER: Yo fui una gran parte de Supertramp. Sé que para todo el mundo las canciones que interpreto en mis conciertos son canciones de Supertramp, pero para mí siempre han sido canciones de Roger Hodgson. Son mis bebés. Muchas de ellas las compuse incluso antes de formar Supertramp y para mí son simplemente mis canciones. Me doy cuenta de que mucha gente adora esta música, aunque piense en ella como música de Supertramp. Y yo siempre interpreto en mis conciertos todas esas canciones que me han acompañado a lo largo de mi vida: “Dreamer”, “Give a little bit”, “The logical song”, “Take the long way home”, “Brekfast in America”, “Fool’s overture”, “School”… La gente que viene a mis conciertos siente que esas canciones son el alma de Supertramp, porque yo también fui parte del alma del grupo.
PREGUNTA: Se comenta que los créditos de las canciones de Supertramp son erróneos, porque aunque están firmadas por ti y por Rick Davies conjuntamente, la verdad es que componíais por separado. ¿Por qué lo hicisteis así y que piensas al respecto actualmente?
ROGER: Cuando Rick y yo nos conocimos en 1969 empezamos a escribir canciones juntos. El proponía unos acordes, yo componía las melodías y un tercer miembro del grupo escribía las letras. Pero cuando grabamos los discos “Indelibly stamped” y “Crime of the century” ya se había marchado Richard Palmer, que era ese tercer músico, y tanto Rick como yo teníamos más confianza en nuestras posibilidades y ya habíamos comenzado a componer por separado. Aún así, decidimos seguir firmando las canciones de forma conjunta, algo que ya habían hecho anteriormente John Lennon y Paul McCartney, porque eso nos evitaría discusiones del tipo: “Tú tienes cuatro canciones en este disco y yo sólo tengo tres” o “Quiero que el primer single sea una canción mía”. Si ahora pienso en ello, me da la impresión de que tal vez fui un poco tonto, pues la mayoría de las canciones famosas del grupo eran mías (RISAS). Tal vez por entonces los abogados que tenía no eran demasiado buenos (RISAS). Al final nuestra relación también acabó como la de Lennon y McCartney, y en mis conciertos sólo interpreto las canciones que escribí yo. Y Rick hace lo mismo con las suyas.
PREGUNTA: ¿Cómo son tus actuales relaciones con el resto de miembros de Supertramp?
ROGER: Mis relaciones son buenas con todos ellos. Por desgracia, desde hace varios años Rick está teniendo algunos desacuerdos legales con los demás, y eso ha creado algunas tensiones y dificultades en sus relaciones personales. Yo me he mantenido al margen de esos temas e intentado mediar entre ellos mientras he podido. En cualquier caso, actualmente me llevo muy bien con todos.
PREGUNTA: Estuviste muchos años apartado de los escenarios después de dejar Supertramp. ¿Qué esperabas cuando comenzaste tu carrera en solitario y qué piensas de tu éxito actual?
ROGER: Estoy muy agradecido por mi situación actual y me hace muy feliz que las canciones que compuse hace tantos años hayan superado el paso del tiempo. Me gusta mucho que el público todavía quiera escucharlas, pero lo que más me gusta es que nunca me canso tocarlas. Conozco a muchos artistas que han acabado hartos de tocar sus canciones. Cuando salgo al escenario cada noche y empiezo a tocar “Take the long way home”, realmente me siento como si estuviese tomando el camino a casa. Esas canciones son parte de mi vida y nunca me canso de ellas. ¡Es algo sorprendente, pero muy agradable! “Dreamer” es una canción maravillosa, y “Give a little bit” tiene la cualidad de hacer sonreir a todo el mundo. Es maravilloso tener una canción que provoca sonrisas. También tengo canciones más dramáticas, como “Fool’s overture”, que es muy impactante, sobre todo cuando la toco con orquesta. Y “The logical song” es una canción que significa mucho para montones de personas y contiene una cuestión muy importante: “por favor, decidme quién soy yo”. Sí, estuve alejado de los escenarios durante dieciséis o diecisiete años, mientras criaba a mis hijos. En todo ese tiempo no salí de gira e incluso me pregunté si volvería a salir de gira alguna vez. Ahora he vuelto a hacerlo porque mi voz sigue en forma y porque mucha gente en todo el mundo quiere escuchar mis canciones. Eso me produce una gran satisfacción como artista.
PREGUNTA: Por tu forma de hablar sabemos que tienes una visión muy romántica de la música, pero crucemos al “otro lado”… ¿Qué opinas de la piratería musical y de lo extendido que está el intercambio de archivos en nuestros días?
ROGER: No puedo culpar a nadie, porque yo también lo hago (RISAS). Me gusta bajarme canciones de Internet, pero creo que los artistas deben sobrevivir. Estamos llegando a un punto en el que el artista tiene muy difícil seguir adelante con su carrera porque no gana dinero suficiente. Tendría que recibir una remuneración por su trabajo: si te gusta una canción, deberías pagas por escucharla. Ahora las cosas están cambiando y todavía está por ver qué pasará en el futuro. Tal vez cada artista debería tener su propia página web y cobrar por las descargas de canciones que se hagan allí. Me gustó mucho lo que hizo Radiohead. Me parece una gran idea eso de dar a conocer tu música y pedir dinero a cambio.
PREGUNTA: Radiohead puede hacer eso, pero ¿podrían hacer lo mismo los grupos que no son famosos?
ROGER: Sí, lo entiendo. Pero los grupos que no son famosos también podrían ganar dinero así, aunque tengan firmado un contrato con alguna discográfica. Radiohead ganó mucho dinero mediante ese sistema. Seis dólares por cada disco vendido, al fin y al cabo, es más de lo que te paga actualmente una compañía de discos.
PREGUNTA: Tu música es muy popular y ha influenciado a otros grupos. ¿Eres capaz de identificar esas influencias en la música moderna?
ROGER: Claro que sí, hay muchos elementos evidentes. El grupo Gym Class Heroes tuvo un gran éxito basándose en mi canción “Breakfast in America”, y eso impulsó su carrera. Unos años antes Goo Goo Dolls arrasó con “Give a little bit”, y a Scooter también le fue muy bien con una versión de “The logical song” en 2001. Me resulta interesante ver a otros artistas triunfar con mis canciones, pero sé que existen otras bandas, como los ingleses The Feeling, que reconocen la influencia de Supertramp en su música. Nuestras canciones son una buena herencia como fuente de inspiración para los nuevos artistas.
PREGUNTA: En esta gira estás dando conciertos sin banda, simplemente acompañado por otro músico. ¿A qué se debe esto?
ROGER: Me encanta este tipo de conciertos, porque son muy especiales. El público se lleva una sorpresa y además así soy capaz de tener un contacto más directo con ellos. Al no tener una banda detrás de mí puedo cambiar el repertorio sobre la marcha y también puedo conseguir que mi voz salga desde lo más profundo de mi corazón, incluso convertirla en un susurro si así lo deseo. La gente me dice muchas veces que les sorprende la riqueza del sonido que producimos sólo dos músicos sobre el escenario. Muy poca gente echa de menos el bajo o la batería.
PREGUNTA: ¿Podemos tener alguna esperanza de que grabes un nuevo álbum?
ROGER: ¡Sí, la esperanza es lo último que se pierde! (RISAS) Las canciones existen. Ya están preparadas, y sólo necesito tiempo para grabarlas. El problema es que yo siempre necesito mucho tiempo para grabar un álbum. En estos momentos me apetece más salir de gira y tocar en directo para la gente, y no encerrarme en un estudio durante cinco meses.
PREGUNTA: Muchas gracias por tu tiempo, ha sido un placer.
ROGER: El placer ha sido mío.
