Entrevista de Anthony Jenkins para el periódico canadiense "The Globe and Mail" que gira en torno a la vida espiritual de Roger Hodgson.


Roger Hodgson cofundó la banda de rock Supertramp, que ha vendido más de 60 millones de discos en todo el mundo. Compuso muchos de los grandes éxitos del grupo, como ‘The logical song’ y ‘Take the long way home’, antes de abandonar la banda en 1983. Su último trabajo es ‘Classics Live’, y actuará en el Casino Rama de Orillia los días 16 y 17 de Noviembre, y en el Colisseum de Windsor el día 18.


PREGUNTA: ¿Eres un hombre religioso?

ROGER: Soy un hombre espiritual, no religioso.

PREGUNTA: ¿Cuál es la diferencia?

ROGER: Yo siento que mi relación con Dios es muy personal. La relación de cada uno con Dios es muy personal. Cada uno tiene una forma diferente de conectar con ese lugar interior donde se encuentra Dios. Reunir a un montón de gente bajo una misma religión no implica necesariamente que esa sea el único camino a seguir.

PREGUNTA: ¿Naciste dentro de una fe religiosa?

ROGER: Nací dentro de la Iglesia de Inglaterra, que es una especie de religión protestante. Allí me enseñaron a Dios de una forma muy aburrida que ni me interesó ni me inspiró. Había muchas cosas que no tenían ningún sentido.

PREGUNTA: ¿Seguiste teniendo fe, o en algún momento dejaste de tenerla?

ROGER: Aquello era muy confuso. Mi ser anhelaba encontrar algo que tuviera sentido y me sirviera de guía. Pasé diez años estudiando en instituciones privadas inglesas, lo cual suponía un entorno muy duro para un chico tan tímido y tan sensible como yo. No acepté aquella educación a muchos niveles, y dejé los estudios totalmente confundido y preguntándome dónde podría encontrar alguna estabilidad para mi ser, pues quería saber quién o qué era Dios. A lo largo de los años, expresé mi búsqueda de esas respuestas a través de mis canciones. La música se convirtió para mí en la forma de conectar con un lugar mágico que había en mi interior de dónde creo que surge la inspiración. Estoy convencido de que cuando me quito de en medio y dejo que la música se apodere de mí, entonces se produce la magia. Así han nacido muchas de mis canciones.

PREGUNTA: La composición de canciones, ¿es un regalo de Dios?

ROGER: Creo que la mayoría de las cosas son regalos de Dios, y pienso que son aún mejores cuando no ponemos en ellas nuestro ego.

PREGUNTA: ¿Cómo expresas en tus canciones tu fe en Dios?

ROGER: En realidad se trata de intentar ejercer de ser humano cada día. Si hay un objetivo en la vida, creo que estamos aquí para aprender a vivir. Creo que Dios es el amor en su definición más pura y simple.

PREGUNTA: Esa es una filosofía muy hermosa. Algunas personas fervientemente religiosas pueden ser muy pesadas, como esos fanáticos que consiguen que la gente se harte de ellos e incluso de Dios…

ROGER: A mí también me cansan, y por eso mi relación con Dios es tan privada. Cuando yo escribo sobre Dios en mis canciones, es como si tuviera un doble significado. Puedes pensar que se trata de una canción dedicada a Dios, pero también que está dedicada a una chica.

PREGUNTA: En la canción ‘Babaji’, del álbum de Supertramp ‘Even in the quietest moments’, tú cantas “¿Qué es lo que me hace creer en ti?”… ¿Qué es lo que te hace creer?

ROGER: Las experiencias que he tenido a lo largo de mi vida. Esa canción, por ejemplo, la escribí después de leer el libro ‘Autobiografía de un yogui’, de Paramhansa Yogananda. No se parecía a nada de lo que había visto hasta entonces, y me cambió la vida, enviándome a una búsqueda espiritual.

PREGUNTA: ¿Recomendarías ese libro en vez de la Biblia?

ROGER: Se lo recomiendo a cualquiera que se encuentre en esa búsqueda. Depende de lo que cada uno esté buscando.

PREGUNTA: ¿Has tenido momentos de duda? Por lo que recuerdo, Cristo también tuvo dudas en el Huerto de Jetsemaní…

ROGER: Nunca he tenido dudas sobre Dios, pero muchas veces he tenido dudas sobre mí mismo. Para mí, Dios es seguramente la cosa más difícil sobre la que hablar. Me he cansado de los predicadores, y ni siquiera estoy dispuesto a predicarme a mí mismo de algún modo. Mis canciones son muy sinceras porque las he usado para expresar mis deseos de amar y de conocer a Dios. Mirando retrospectivamente, veo que yo ni siquiera era consciente de ello. En cierta manera, era mi forma de rezar. Cuando una canción surgía, para mí era lo más parecido a la felicidad absoluta. Era ese tipo de conexión, algo mágico, la verdadera inspiración.

PREGUNTA: ¿Inspiración proporcionada por Dios?

ROGER: Siempre he creído que la verdadera inspiración procede de una fuerza superior, llámese Dios o lo que sea. Incluso aunque yo tuviera que aportar mi talento para saber dónde colocar los dedos y para poner mi pasión y mis deseos, estoy convencido que era esa conexión con Dios la que componía esas canciones a través de mí.

PREGUNTA: ¿Y qué nos dices de las canciones que no han sido compuestas a través de la inspiración, sino que han surgido de una forma artificial? ¿Está Dios en ellas?

ROGER: He compuesto algunas canciones así y, para ser sincero, no han soportado el paso del tiempo.

PREGUNTA: ¿Está Dios contento con tu trabajo?

ROGER: No creo que Dios nos juzgue, sino que nos juzgamos nosotros mismos. Tenemos la posibilidad de vivir en armonía en función de las decisiones que tomemos. Para tomar la mejor decisión, tienes que hacer caso a tu intuición, tus instintos y tu corazón. Cuando yo he hecho eso, mi vida se ha llenado de gracia.