Crónica del concierto de Roger Hodgson en Liverpool, publicada por Lee Millward en el portal musical "Get Ready to Rock".


Ya que Roger Hodgson no visita estas tierras tan a menudo como a mí me gustaría, siempre tengo un gran sentido de la anticipación y del placer cuando anuncia una gira. Esta vez no iba a ser una excepción, y superó con creces mis expectativas. Además, en esta ocasión Roger traía con él una banda en lugar del multifuncional y omnipresente Aaron MacDonald. Iba a ser, pues, una noche especial…

Roger salió al escenario en medio de una gran ovación y arrancó el concierto a lo grande con ‘Take the long way home’, canción que fue seguida por ‘School’, ‘In jeopardy’ y ‘Hide in your shell’. Hombres hechos y derechos ya estaban llorando a lágrima viva y sólo llevábamos cuatro canciones del concierto.

Hodgson tiene la suerte de haber compuesto tantos temas magníficos a lo largo de su carrera que posee un enorme y valioso material del que tirar en sus conciertos. Todos tenemos nuestras canciones favoritas y me agrada decir que de las mías tocó todas menos una, la cual se quedó fuera del repertorio por una razón muy especial.

A continuación nos ofreció muchas otras canciones, entre las que se encontraban la sublime ‘Along came Mary’, ‘Sister Moonshine’ y ‘A soapbox opera’. Aunque yo ya le había visto actuar y me había dejado fascinado durante sus tres últimas visitas al país, me quedé estupefacto con el sonido tan rico y potente que llegaba desde el escenario de una forma tan fluida y natural.

Me atrevería a decir que lo que escuché fue incluso mejor que las interpretaciones del disco en directo ‘Paris’ de Supertramp, y eso es mucho decir… ‘The logical song’ cerró la primera parte del concierto entre grandes aplausos y gritos de alegría.

Roger abrió la segunda parte de la actuación con ‘Child of vision’ y después llegó el turno de ‘Lord is it mine’, la cual me dio la impresión de que era cantada por todas y cada una de las personas que llenaban el Philharmonic Hall, llegando casi a ahogar la voz del cantante con el entusiasmo más absoluto.

Enseguida Roger nos ofreció una auténtica joya… Anunció que, debido a su amor por los Beatles y en particular por John Lennon, iba a interpretar ‘Across the universe’. El público se volvió loco, y podía notarse cómo temblaba el edificio con el alboroto formado por una audiencia enardecida.

Gritos multitudinarios de “¡Roger is a Scouser!” (“¡Roger es de Liverpool!”) resonaron al final de la canción, y creo que el artista se encontraba visiblemente emocionado por el torrente de felicidad y diversión que inundaba el recinto… ‘Dreamer’ y ‘Fool’s overture’ pusieron el colofón a la actuación entre otra ovación de estruendo.

Poco después, Hodgson regresó al escenario con una gran sonrisa e interpretó ‘Two of us’ (para entonces el que suscribe ya tenía lágrimas en los ojos), ‘Give a little bit’ e ‘It’s raining again’.

Roger Hodgson llegó hasta el corazón de cada uno de los presentes, y todos los hombres, mujeres y niños se marcharon a casa con un fuego resplandeciente en su interior, siendo conscientes de que esa noche habían formado parte de algo excepcional…

Por aquí se espera que Roger regrese muy, muy pronto.