Crónica de Ybes Gabay sobre el concierto ofrecido por Roger Hodgson en la localidad francesa de Toulouse, publicada en el periódico galo "La Depeche".
Ayer sopló un precioso viento de nostalgia en el Casino Theatre Barriere de Toulouse. Roger Hodgson, antiguo cantante, dueño y autor de la casi totalidad de las canciones de Supertramp, devolvió la memoria a 1.200 fans que, desde luego, jamás se han olvidado de él.
Visiblemente emocionado por la fenomenal acogida que le habían reservado, el inglés se puso a bromear en francés junto con su fiel saxofonista Aaron MacDonald, tomándose su tiempo para saborear la relación tan particular que le une a su público desde hace 40 años.
“Vais a escuchar estos canciones tal y como ellas fueron el día el cual las he compuesto”, dijo mientras sonreía. La sintaxis no era gran cosa, pero la felicidad en él parecía inmensa, tanto que hizo al público levantarse varias veces para mostrarle su reconocimiento en forma de ovaciones.
Con la voz como siempre en un tono muy alto, Hodgson encadenó esas melodías eternas a través de sobrios y elegantes arreglos, ofreciendo un frescor y un entusiasmo sin precedentes.
Desde un transformado “Hide in your shell” hasta un supervitaminado “Dreamer”, pasando por una siempre luminosa “The logical song”, Roger Hodgson llegó hasta el corazón de sus fans a través de la sencillez, el humor y el talento que ya sabíamos que tenia. Un tipo amable, este Roger.
