Reportaje de Stephen Cooke para el diario canadiense "The Chronicle Herald", en vísperas de la llegada de Roger Hodgson a Halifax.

Roger Hodgson ha llamado a su nuevo DVD en directo ‘Take the long way home’ en honor de uno de los numerosos éxitos que grabó con la banda británica de pop progresivo Supertramp. Pero, en muchos aspectos, el concierto que ese DVD contiene, grabado en la Place des Arts de Montreal, tuvo lugar en el hogar que tiene lejos de su casa.

En los años 70, pocos países acogieron tan calurosamente a Supertramp como Canadá. Ahora, después de más de una década desaparecido del panorama internacional, Hodgson regresa con una gira en solitario que llegará al Auditoria Rebecca Cohn de Halifax este sábado por la noche.

Hablando al teléfono desde una parada de la gira en Sherbrooke (Quebec), Hodgson cita una estadística que le resulta muy agradable: uno de cada veinte canadienses compró los discos ‘Crime of the century’ (1974) y ‘Breakfast in America’ (1979). Dada la gran repercusión de ambos álbumes tras su publicación, se trata de un dato difícil de refutar.

“Uno de mis objetos favoritos que guardo en casa es una placa que rememora el disco de diamantes que conseguimos en Canadá por ‘Breakfast in America’”, dice con un acento marcadamente británico.

“‘Crime of the century’ llegó al primer puesto de las listas antes en Inglaterra, pero poco después triunfó en Canadá. En Estados Unidos el éxito tardó mucho más en llegar, pero en Canadá nos descubrieron muy pronto y el rumor se extendió como un reguero de pólvora. Todo empezó en la zona de Québec, pero enseguida tuvimos un romance amoroso con todo el país. Fue todo un fenómeno”.

Ese romance amoroso sigue su curso en el DVD ‘Take the long way home’, que capta a Hodgson enfrente de un público entusiasta y que ya ha conseguido ser disco de platino en Canadá.

“Creo que la mejor prueba de lo que es el DVD es que yo puedo verlo, cuando normalmente soy incapaz de ver nada donde aparezca yo. Todo funcionó muy bien. Cuando empezamos aquella gira teníamos muchas peticiones para grabar un DVD, y sabíamos que en Montreal tendríamos una gran oportunidad de hacerlo. Realmente mereció la pena”.

Después de abandonar Supertramp en 1983, Hodgson se embarcó en una carrera en solitario editando discos como ‘In the eye of the storm’ y ‘Hai hai’, el segundo de los cuales estuvo marcado por un accidente, que tuvo lugar la misma semana de su publicación, en el que Hodgson se rompió las dos muñecas. Su recuperación fue larga, pero finalmente consiguió volver a hacer música, y en el año 2000 publicó el álbum ‘Open the door’.

“Tengo unas sesenta canciones esperando a que haga algo con ellas, así que incluimos ‘Oh brother’ en el DVD como una especie de aperitivo”, dice. “Pero he estado mucho tiempo fuera de los escenarios, así que necesito ponerme a punto y hacer que la gente sepa que he vuelto. Y ellos están más familiarizados con Supertramp que con Roger Hodgson, así que interpretar esas canciones que conocen tan bien es una gran forma de demostrarles que he regresado y que estoy en forma”.

También le resulta de gran ayuda que esas canciones no hayan desaparecido de la circulación. Aparte de que se siguen emitiendo en la radio, Paul Thomas Anderson incluyó ‘Goodbye stranger’ y ‘The logical song’ en la banda sonora de su drama ‘Magnolia’, y más recientemente el grupo Goo Goo Dolls, que actuará en el Metro Centre de Halifax el próximo día 21, grabó una versión del tema ‘Give a little bit’.

“Es una regla de oro que una buena canción siempre será una buena canción, y aguantará bien el paso del tiempo”, dice. “Para mí es maravilloso que esas canciones hayan durado tanto. Si no disfrutase interpretando sobre el escenario todas esas canciones que compuse hace tantos años, desde luego que no lo haría”.

“Pero cada vez que me subo a un escenario disfruto muchísimo cantando esas canciones, pues todas ellas tienen la cualidad de ser perennes. Y lo mejor es que tengo muchas: ‘Take the long way home’, ‘Dreamer’, ‘Breakfast in America’… Me lo paso muy bien cantando todas esas canciones”.