Andre Wetjen habló con el saxofonista de Supertramp John Helliwell coincidiendo con la llegada de Supertramp a Kelowna, a finales de la gira "One more for the road".

 

Supertramp debería cambiar su nombre por el de Superatracción, y no estamos hablando de ningún evento deportivo. Es el primer grupo para el que se ha añadido un segundo concierto en el Skyreach Place, algo al alcance de muy pocos, teniendo en cuenta los grandes nombres que han actuado en Kelowna a lo largo de los últimos tres años.

"Es algo que me complace mucho", dice John Helliwell, de Supertramp, al oir la noticia en una entrevista telefónica a principios de esta semana.

Las dos noches Supertramp interpretará temas viejos y nuevos, ya que están promocionando Slow Motion, su último álbum. "El nuevo disco es un poco más jazz y blues que los anteriores", dice Helliwell, "lo que demuestra aún más cuáles son nuestras raíces".

Slow Motion es el primer disco en estudio de Supertramp en cinco años. "Estábamos esperando a que Rick encontrara la inspiración, lo cual puede tardar unos cuantos años", dice Helliwell en referencia al compositor y miembro fundador del grupo Rick Davies.

El nuevo disco contiene nueve canciones, cuatro de las cuales podrán ser escuchadas por los fans de Supertramp cuando la banda actúe en Kelowna el martes y el miércoles próximos. Algunas de las nuevas canciones son realmente antiguas, con una larga historia que abarca varias décadas. ‘Goldrush’ es un claro ejemplo.

"‘Goldrush’ fue compuesta hace treinta años", dice Helliwell. "Llevábamos mucho tiempo intentando arreglarla, pero nunca quedaba suficientemente bien. Algunas canciones necesitan su tiempo, como el buen vino".

No habrá teloneros en los conciertos de Kelowna, pero los asistentes invertirán bien su dinero: serán dos horas repletas de Supertramp, sin interrupciones. "Es preferible que la gente haga pis antes de que empiece el concierto", avisa Helliwell.

Cada noche interpretarán muchos de los clásicos de los 70, canciones que les ayudaron a vender más de cincuenta millones de discos durante todos estos años. Al grupo, según Helliwell, le gusta tocar lo que los fans quieren oir, incluyendo esos temas que eran del vocalista y compositor Roger Hodgson, que ya no está en la banda.

"Al principio, cuando Roger se fue, no tocábamos ninguna de sus canciones, pero después empezamos a incluir en el repertorio una o dos". Su marcha, a principios de los años 80, les dejó "una sensación extraña". "Así que pensamos desmarcarnos con nuestro siguiente álbum, intentando ser un poco más serios que hasta entonces".

Y eso es lo que hicieron en 1985 con ‘Brother where you bound’, un disco con sabor a rhythm and blues que contenía el éxito ‘Cannonball’. ¿Hablan alguna vez los miembros de Supertramp de una posible reunión con Hodgson?

"Siempre se habla de que Roger va a volver", dice Helliwell. "Pero siempre son otros los que hablan de ello". Después se pone serio: "Sería estupendo tocar de nuevo con Roger", dice. "Quiero decir, sería algo bonito y nostálgico".

Aparte de eso, Helliwell confía en la actual formación de la banda, compuesta por siete miembros, la misma que participó en la última gira de 1997 y que fue galardonada por la revista Pollstar como "Mejor Regreso del Año".

"Es el mejor Supertramp que ha subido al escenario jamás". La gira actual de setenta y tres conciertos arrancó la pasada primavera con actuaciones en trece países europeos e inició su parte norteamericana hace unas semanas en St. John's, Newfoundland.

Supertramp actuará en Kelowna el martes 17 y el miércoles 18 de Septiembre. Ya no hay entradas para el primer concierto, pero sí para el segundo, a un precio de 59,50 dólares más impuestos, disponibles en Ticketmaster.