Crónica de Fátima Uribarri en relación al concierto de Roger Hodgson en Marbella durante su gira "Breakfast in America" tour, aparecida en la web de "Intereconomía".


Suenan los primeros acordes de la armónica de ‘Take a long way home’ y se pone en marcha la magdalena de Proust. Llueven los recuerdos sobre el público marbellí que acudió el lunes pasado al único concierto en España de Roger Hodgson, compositor, voz, teclados y guitarra del mítico grupo Supertramp.

Roger Hodgson (Portsmouth, Inglaterra, 1950) tiene un aire a viejo piel roja, una sonrisa casi perenne y la voz exactamente igual que cuando discos como ‘Breakfast in America’ o ‘Crime of the century’ copaban las listas de éxitos de finales de los años 70 y principios de los 80.

Hodgson es uno de los grandes. Ha vendido 60 millones de discos y es autor de temas míticos como ‘The logical song’ o ‘The fool’s overture’, canciones de la banda sonora vital de varias generaciones.

“Para mí es un regalo, una bendición, hacer regresar a la gente a otros tiempos, hacerles pasar un buen rato”, comentó el músico a la prensa tras un concierto de dos horas y media (con descanso) que fue una inyección de nostalgia para los más de dos mil espectadores que acudieron a recordar a Supertramp.

En el concierto de Marbella, uno de los programados dentro del Starlite Festival, Roger Hodgson realizó un magnético viaje al pasado. El público, más bien talludito, con algunas ‘gunillas’ y canas repeinadas hacia atrás, disfrutó de los temas supertramperos.

“Con la música se habla de la verdad. Yo busco música que me haga sentir algo. Es alimento para el corazón”, comentó Hodgson.  Por eso canta los temas de siempre: ‘Give a little bit’, ‘School’, ‘Lady’, ‘Easy does it’, ‘It’s raining again’, ‘Dreamer’… “La gente quiere escuchar las viejas canciones. Como artista no siento la necesidad de tener que hacer algo nuevo”, sostiene el cantante.

Antes de arrancar ‘Lovers in the wind’, por ejemplo, contó que este tema lo compuso en un momento duro de su vida y que le reconforta saber que mucha gente se ha sentido consolada al escucharlo. También explicó que tenía tres temas instrumentales con los que no sabía muy bien qué hacer. Al final los ligó y nació así ‘The fool’s overture’, uno de los himnos de Supertramp.

También es suyo ‘Crisis? What crisis?’. Le preguntamos si habría que componer un tema similar para la actualidad: “Muchas canciones que escribí entonces son reales ahora, a lo mejor soy un visionario. Estos temas no se sienten viejos”, respondió, siempre amable y sonriente.

Los temas son los mismos, y la voz, también, aunque él opina que “es un milagro: ahora canto mejor”. Ha sobrevivido bien a su marcha de Supertramp, en 1983. Lo demostró el clamor con el que fue recibido en el magnífico escenario de la cantera de Nagüeles, en un festival que destila glamour y se sostiene en un cartel repleto de primeras espadas: Tony Bennet, Julio Iglesias, Paul Anka, Christopher Cross, Raphael...