Supertramp en Madrid (por Juan Honrado)

Cómo sacarle el jugo a un video treinta años después.

Este sería el título de mi crónica, porque ya les vale… Gran espectáculo audiovisual, decía la publicidad de los conciertos… pues no sé yo, de audio vale, pero lo que es visuaaaaal… estos tíos llevan con el mismo video del trenecito desde la gira que vimos en el 79, que ya está bien, coño, poner aunque sea una foto del AVE   
Y con el Crime of the Century exactamente igual, el mismo video de hace treinta años, y aún así son los mejores, porque lo del Gone Hollywood, el laguito de Downstream o las imágenes de From now on mejor ni hablamos. Y con los comentarios pasa lo mismo.

Lo de la comida española, que está muy rica y tal, que te gusta mucho la “pallea”, sí, pallea, no es que lo haya escrito mal, es lo que dijo mr. Helliwell hace unos treinta años en Madrid… y luego, pues eso, que sí, que todo eso está bueno y se lo come si no hay más remedio, pero que a él lo que más le pone es su desayuno en América.


Musicalmente la cosa cambia, aunque tampoco demasiado. Se respeta la estructura original de los temas y se improvisa lo justo, salvo en el solo de Rick en Another man’s woman y el de Carl al final de Goodbye Stranger, aunque para lo que se le oye al pobre… Esa es otra, el sonido debe ser que va por grado de veteranía. A Rick se le oye perfectamente, tanto la voz como las teclas, a John igual, el sonido del saxo es limpio en casi todos los solos, digo en casi todos porque en alguno no lo fue, pero no por culpa del tío de la mesa, sino por alguna que otra gamba como en el Breakfast (estaría concentrado pensando lo que iba a decir para presentarla   ) o alguna otra nota por ahí que se le fue un poquillo, igual que a Rick (creo que fue en la parte intermedia de Rudy, que alguien me corrija) se le fue un poco la mano, o es que intentó meter un acorde disonante…

Al batería también se le oye, yo diría que incluso demasiado, los timbales para mi gusto suenan demasiado graves, igual que el bombo, pero eso será cuestión de gustos. Luego Jessie, aunque no tiene puntos como veterano, como tiene enchufe por hijo de su padre, también se le oye perfectamente, tanto en las voces como en las guitarras y las teclas. El bajo pasa desapercibido, pero eso es como debe ser, como los buenos árbitros, si no se habla de ellos mejor. Y ahora vamos con los pobres de la banda derecha del escenario, que son los peor parados.

En mi opinión el guitarrista principal está un poco desaprovechado, en los solos se le oye poco y menos cuando intenta explayarse. Cassie Miller me imagino que vendrá por acompañar a su marido, porque será lo único que pueda acompañar, aparte de hablar con él un rato en el escenario, como hicieron ayer (que les controlé con los prismáticos), porque a esta chica no se la oye apenas, otro músico desaprovechado.
Menos mal que a él sí se le oía bien, este no tiene puntos ni por veterano ni por familiar, será para compensar el escaso protagonismo de su señora esposa. A Gabe Dixon tampoco le dan excesivo protagonismo, y casi mejor, prefiero a Jessie interpretando las canciones de Roger que a este hombre vociferando el Dreamer, por no hablar de It’s raining, aunque en esa aproveché para ir al baño y a por cerveza, era el momento  

De las canciones pienso como ya han dicho, que el comienzo debería ser más impactante, yo creo que Ain’t nobody but me sería perfecta para arrancar y calentar al personal, You started laughing y luego el Gone Hollywood te dejan un poco frío, sobre todo la primera.

Lo mejor para mí Poor Boy, From now on y Another man’s woman, con el “agüelo” golpeando la banqueta hacia atrás en plan Jerry Lee. Lo peor que nos quedamos sin Asylum, está claro que estos tíos de cambiar lo justito, y para mi gusto demasiadas canciones de Roger sin el propio Roger. Jessie no lo hace mal, pero creo que tienen material más que suficiente para hacer un buen concierto con las canciones de Rick y como mucho tres o cuatro de Roger.

En resumen, buen concierto y pocos cambios respecto a hace treinta años, musicales y sobre todo visuales… coño, si parecía el día de la marmota, esta mañana podía haber aparecido mi madre perfectamente diciendo “hijo, levanta, que llegas tarde al cole”…